Login to MoboReader
icon 0
icon Recargar
rightIcon
icon Historia
rightIcon
icon Salir
rightIcon
icon Instalar APP
rightIcon
Una Muñeca para el Jefe

Una Muñeca para el Jefe

yumyp1901

5.0
calificaciones
398.8K
Vistas
80
Capítulo

Maritza era una mujer de trabajo, acostumbra a costearse sus gastos, aún vivía con su madre una mujer de avanzada edad con una enfermedad terminal sumado a esto una hermana pequeña que sufría de esquizofrenia, tenía 3 años trabajando para las empresas Duncan, era la secretaria del CEO Max Duncan, alias el diablo, un hombre arrogante, impulsivo, una fiera en los negocios y según la prensa un picaflor aunque esto último ella lo dudaba hasta que un día él le pidió ir a su oficina. -Martiza, quiero que sepas que no eres de mi gusto, pero haces bien tu trabajo confió en ti es por eso que te voy a proponer un trato. -Usted dirá señor-Contesto con respeto aunque por dentro quiero sacarle los ojos. -Necesito que te cases conmigo, debemos fingir una relación, aunque sea difícil de creer, todos conocen mis gustos, no me fijaría en un cuervo. Todo lo que salía por la boca de Max eran insultos para Maritza, quien estaba perdiendo la paciencia, apretaba sus manos con furia, no aguantaría más. -No me casaría con usted ni que fuera el último hombre dela tierra, usted señor Duncan, es un « ¡maldito desgraciado! » es por eso que todos lo llaman el diablo y n se equivocan. -No, nos casaremos por amor, ni Dios quiera, es un simple contrato, te pagare una buena suma así que ¿lo tomas o lo dejas? Si dices que no, igual estas despedida. Martiza era quien costeaba los gastos médicos de ambas y mantenía la casa, no tenía una vida propia su mundo giraba en torno a su familia, así que un dinero extra sería de gran ayuda. ¿Qué puede salir mal?

Capítulo 1 Una infancia feliz

Había vivido una niñez feliz, corría por el jardín de su casa, no éramos ricos pero estábamos bien, vivíamos en una hermosa casa, pintada de blanco en su totalidad, con decoración en colores tierra. Mi madre tenía un gusto exquisito, el arte era su pasión. Siempre me cocinaba unas deliciosas galletas con chispas de chocolate. Cuando nació mi hermana, estaba muy feliz. ¡Tendría una hermanita! Compartía todo con ella, hasta que fue diagnosticada con esquizofrenia. Sufría de convulsiones y su comportamiento era difícil de controlar. Nuestra vida cambió, nos ajustamos a las necesidades de Nicole. Mis padres nos amaban demasiado, trabajaban duro para mantenernos. Jamás tuve que trabajar o pedir, al menos no siendo adolescente. Cuando cumplí 16 años, mi padre murió de un infarto, dejándonos devastados a todos. Nuestros sueños se habían acabado y al parecer, la suerte también.

Como si la vida estuviera empeñada en borrarnos del mapa, mi madre fue diagnosticada con cáncer de seno. Pudimos detectarlo a tiempo, pero nos costó reunir para su operación. Su estado de ánimo no ayudaba, pero era comprensible.

Su otra mitad se había muerto. No me quedó más remedio que salir a trabajar. Trataba de emparejar los horarios de la universidad con los de la pizzería. Era camarera, me pagaban bien cuando doblaba turnos. Mi hermana fue empeorando, así que tuve que recurrir a unos amigos de mi padre para pedir ayuda, pero no me tendieron la mano. Era de esperarse: caras vemos, corazones no sabemos. No me quedó de otra que dejar la universidad y buscar otro empleo. Tenía dos trabajos y dos enfermas en casa. La vida no es fácil, pero no me rendiría.

Habían pasado seis años de la muerte de mi padre, mi hermana se mantenía estable, siempre y cuando estuviera medicada. Mi madre era otro caso, su cáncer había vuelto y esta vez para quedarse. Tenía metástasis, así que en cualquier momento la perderíamos. Debía aguantar humillaciones, desprecio, excesos y pare de contar, además de un horrible jefe. Bueno, no era un hombre horrible, ni mucho menos. Medía uno dos metros, de cuerpo fornido. Tenía ojos marrón claro, como la miel. Su cabello era como él, rebelde, un liso rebelde. Su piel era blanca, como su sonrisa. En el primer año de estar aquí, me enamoré perdidamente. Era mi amor platónico, pero él se encargó de matar todo con su espantoso trato. Seamos realistas, jamás se fijaría en mí.

Soy una mujer corriente, un poco gordita. Tengo cabello largo, color miel, el cual mantengo en un moño siempre. Me gusta andar formal, visto ropa holgada y mi montura de pasta negra le quita presencia a mi rostro. Así que es lógico que no se fijaría en mí. Él me llama el cuervo, porque según él soy una mujer gris, sin nada de atractivo. Lo escuché decirle a su mejor amigo, así que mandé todos mis sentimientos de paseo. Ese despreciable no merecía nada de mí.

Tenía que aguantar desprecios de ese desgraciado durante todos estos años. Me encargaba de sus comidas de lunes a lunes, mandaba su ropa a la tintorería y tenía que estar pendiente de sus compras, arreglos para la casa y el colmo de los colmos: cubrir sus citas. Los martes salía con mujeres morenas, los miércoles le daba oportunidad a una que otra modelo y los jueves eran libres, salía a beber con sus amigos, que por cierto, eran tan chocantes como él.

Los fines de semana los pasaba con su familia. El señor y la señora Duncan eran personas bastante buenas, o al menos eso era lo que suponía. Unas que otras veces, el señor me había ayudado con mis gastos médicos. Los hermanos del diablo eran totalmente distintos a él. Marcelino era el hermano mayor, estaba casado con una prestigiosa abogada, creo que se llamaba María, Remata o Maira, no recuerdo bien. John era el del medio, bastante centrado. No se le conocía novia, todos decían que era gay, yo la verdad lo dudo porque en una de mis misiones en la tintorería, lo encontré muy cariñoso con la administradora del lugar. Me hice la que no lo conocía y seguí mi camino. Max, alias el diablo, era el menor de los tres. Un hombre de negocios, había estudiado negocios en Harvard. Cuando su padre enfermó gravemente, se hizo cargo de las empresas y hasta la fecha lo ha hecho muy bien.

Como todos los lunes, llegaba más temprano a la oficina. Faltaban veinte para las siete, tenía el café listo y las carpetas

de los nuevos contratos preparadas. Debía llevar la ropa a la tintorería, pero eso sería para más tarde. Aparece el diablo, no estaba de buen humor hoy, pobre de mí. El teléfono de mi escritorio suena.

-¿Dígame, señor, qué desea? -le digo en tono profesional.

-¿Qué voy a desear de ti? Por favor, no me insultes tan temprano. Ven a mi oficina, ¿o es que se te olvidó que debes repasar la agenda?

Odiaba a este hombre, no entiendo cómo las mujeres podían aguantarlo.

-Sí, señor, ya voy -desgraciado.

Me levanto de mi escritorio, me hago la cruz y entro a su oficina.

-Señor, hoy tiene una reunión a las nueve con los mexicanos. Ya tengo preparados los contratos.

-Maritza, siéntate, tenemos que hablar.

-Usted dirá, señor -contesto con respeto, aunque por dentro quiero sacarle los ojos.

-Necesito que te cases conmigo, debemos fingir una relación. Aunque sea difícil de creer, todos conocen mis gustos. No me fijaría en un cuervo.

Aprieto mis manos en señal de furia, no aguantaba más. ¿Acaso había escuchado bien? ¿Se había vuelto loco?

-No me casaría con usted ni que fuera el último hombre de la tierra, señor Duncan. Es un «¡maldito desgraciado!». Es por eso que todos lo llaman el diablo y no se equivocan.

Cada palabra que sale de mi boca va impregnada de mucho veneno. Eran años acumulando este odio, y todo gracias a su mal trato.

-No nos casaremos por amor, ni Dios lo quiera. Es un simple contrato. Te pagaré una buena suma, así que ¿lo tomas o lo dejas? Si dices que no, igual esta despedida...

Lo miro a los ojos, sus labios se mueven pero aún no puedo creer lo que está diciendo. He trabajado duro todos estos años, no tengo este puesto porque sí.

-O sea que me quitarás el trabajo porque no quiero casarme con usted, señor diablo.

-No creas que porque me digas así me voy a poner a llorar -me sonríe con malicia-. Sabes que me he ganado ese apodo con mucho esfuerzo. Y si no aceptas, esta es tu despedida. Deberías aprovechar, te costearé ropa, salón de belleza y todas esas cosas que usan ustedes las mujeres.

-No lo necesito, así que renuncio «¡váyase al infierno!».

-Como digas, entonces espero que mueras en tu propia miseria.

Lo último que escucho al salir de la oficina es una carcajada. Después de tanto tiempo, me siento viva. Soy libre.

Seguir leyendo

Otros libros de yumyp1901

Ver más

Quizás también le guste

Si, aceptó ser su esposa sustituta señor Parrow

Si, aceptó ser su esposa sustituta señor Parrow

Romance

4.9

Sebastian Parrow, millonario, guapo, y muy cotizado, había anunciado su matrimonio con su novia María, con la cual llevaba años de relación. Dueño de una empresa de vinos de alta calidad, justo el día, en que iba anunciar su exquisito vino estrella, un accidente automovilístico acaba con la vida de sus padres, los cuales iban a celebrar junto a él, pero para desgracia de Sebastián, queda con vida y una ceguera total. Su vida se había convertido en un infierno, y su única esperanza era su novia María, la cual, lo abandona días antes de su boda sin importar los sentimientos y la condición en la que él se encuentra actualmente. La peor pesadilla de Sebastián se había hecho realidad, quedarse solo por ser un hombre ciego, el cual lo volvió un hombre lleno de frialdad y arrogancia. Una noche, una chica hermosa, la cual había sido drogada por un hombre maligno queriendo abusar de ella, logra escapar de sus garras, su única salvación fue subir a un auto, ya que su cuerpo no daba para más, debido a que la droga estaba haciendo de las suyas, y justamente, es el auto de Sebastián Parrow donde él se encuentra con un genio de los mil demonios porque su mano derecha estaba tardando. Aquel encuentro del destino, arrastró a Anastasia a ser la esposa Sustituta de Sebastián Parrow, a cambio de que él pagará los gastos médicos de su madre, ya que tiene cáncer avanzado y necesita atención con carácter urgente.

Papá cásate con mamá

Papá cásate con mamá

Romance

5.0

Clara Goodman, es la primogénita de la familia Goodman, una familia de empresarios de Nueva Zelanda, su madre murió cuando ella tenía seis años, y su padre volvió a casarse poco después con una mujer que la odiaba, más aún cuando nació su hija, y hermana de Clara, Karen, a la que su madrastra consideraba la verdadera heredera de la fortuna Goodman.   Justo por eso hace que la vida de Clara durante su infancia un auténtico infierno. Los años más felices de la heredera, fueron cuando fue enviada por su padre, que desconocía lo que verdaderamente pasaba en su casa, a los Estados Unidos, exactamente a Washington, para estudiar en la Universidad, cumpliendo así la promesa que le hizo a la madre de Clara.   Una noche que una compañera de la universidad le hicieron una jugada, tras emborracharla, Clara acabó pasando la noche con un desconocido, que resulto ser el multimillonario turco más poderoso de Asía, Azize Osman, Dueño del grupo Osman.   A la mañana siguiente, Clara huyó, avergonzada sin dejar rastro de quién era ella, por el contario Azize pensó, en un principio, que ella era mujer de la noche, hasta que descubrió unas manchas rojas entre las sábanas, y supo que él había sido su primer hombre, y eso él nunca lo olvidaría.     Pero lo peor estaba por llegar, cuando dos meses después Clara descubrió que estaba embarazada. Ella quiso pedir ayuda a su padre, pero eso nunca llegó, gracias a la manipulación de su madrastra, que le ofreció una cantidad de dinero enorme para que pudiera vivir, a cambio de que ella rechazara su herencia, todo lo que Clara conocía acabó, fue así como Clara se encontró embarazada, y expulsada de su familia.    Pero todo cambio siete años después, cuando el inteligente hijo de Clara, Mack Goodman, quiso saber quién era su padre biológico, y gracias a su excepcional inteligencia, y a sus habilidades informáticas de genio, sin que su trabajadora y famosa arquitecta madre lo supiera, no sólo descubrió quien era, sino que, además, ideo un plan para que ambos estuvieran juntos para siempre. ¿Saldrá el plan como quiere este pequeño genio? ¿Es ya demasiado tarde? ¿Podrá Clara vengarse de quiénes le hicieron tanto daño? Muchas preguntas por responder, en mi próxima novela. 

Capítulo
Leer ahora
Descargar libro
Una Muñeca para el Jefe
1

Capítulo 1 Una infancia feliz

30/03/2023

2

Capítulo 2 Los Sucesos

30/03/2023

3

Capítulo 3 La Despedida

30/03/2023

4

Capítulo 4 El Matrimonio

30/03/2023

5

Capítulo 5 El Tesoro

03/04/2023

6

Capítulo 6 Conversaciones en el Desayuno

03/04/2023

7

Capítulo 7 Las Compras

03/04/2023

8

Capítulo 8 Un diablo muy tonto

03/04/2023

9

Capítulo 9 El mismo diablo

03/04/2023

10

Capítulo 10 Derek

03/04/2023

11

Capítulo 11 Complicaciones

26/04/2023

12

Capítulo 12 Desgracias

26/04/2023

13

Capítulo 13 La Realidad

26/04/2023

14

Capítulo 14 Un Plan

26/04/2023

15

Capítulo 15 ¿Despedida

26/04/2023

16

Capítulo 16 Valentia de Borracha

26/04/2023

17

Capítulo 17 Piscina

26/04/2023

18

Capítulo 18 Visitas

28/04/2023

19

Capítulo 19 Presentaciones Amargas

28/04/2023

20

Capítulo 20 Regalos

29/04/2023

21

Capítulo 21 Confesiones

29/04/2023

22

Capítulo 22 Una fiesta de decepciones

29/04/2023

23

Capítulo 23 2 Meses

29/04/2023

24

Capítulo 24 Adios

29/04/2023

25

Capítulo 25 Día uno sin ella.

29/04/2023

26

Capítulo 26 Despedidas que matan

29/04/2023

27

Capítulo 27 Mi historia

30/04/2023

28

Capítulo 28 Mi historia segunda parte

02/05/2023

29

Capítulo 29 Mi historia tercera parte

03/05/2023

30

Capítulo 30 Mi historia cuarta parte

03/05/2023

31

Capítulo 31 Mi historia quinta parte

04/05/2023

32

Capítulo 32 Oportunidades

05/05/2023

33

Capítulo 33 Rumores

05/05/2023

34

Capítulo 34 Chismes

06/05/2023

35

Capítulo 35 Sin posibilidades

07/05/2023

36

Capítulo 36 Su piel

08/05/2023

37

Capítulo 37 La Fiesta

09/05/2023

38

Capítulo 38 Ella

11/05/2023

39

Capítulo 39 Corazon herido

12/05/2023

40

Capítulo 40 La Carta

12/05/2023