Mi bebé, mi compinche
xpresó con ahínco. Ella incluso se ofreció a invitarla a comer, aunque la otra muje
estaba apoyado en el aut
mpezar a tratar a mi bisabuelo?"
juguete de niños común y corriente, pero en realidad era extraordinario. La pant
ra que podía conectarse a un satélite con
iece a hacerlo pronto. Tiene una e
ser
r, como sabes, tu mami es una experta médica. La verdad es que no conozco a nadie mejor que ella en
tenciones. Todos deseaban que ella fuera su médico personal o familiar. Después de
o. Ella va a para el Grupo Patterson, la empresa de tu familia. Yo mismo
¿De verdad
estaba escuchando, y su expresió
Al parecer, se enfada con facilidad y le hace pasar un mal rato a los empleados. De hecho, todos en Egoford le tienen miedo. ¿Te imagin
s una mujer fuerte e inteligente. ¿Por qué tendría ella miedo de alguien? Además, el CEO del Grupo Patterson es pariente tuy
: "¿Por qué no te cae bien? ¿Acaso tú lo ofendiste antes? ¿Es esa la razón por la que te escondiste en
latir. De hecho, su rostro palideció al recordar ese hor
respuesta, se encogió de hombros y prosiguió: "Perfe
bien, te diré lo que pasa. El director ejecutivo de esa empresa es mi tío, y no
dice
ojos. "¿Conrad es tu tío? ¡No tenía idea de eso! Y dime, ¿qué fue
r lo que pasó, no habrá un lugar en la tierra donde pueda esconderme. ¡Mi tío me perseguiría hasta los confines de la
bondad, pero nunca se esperó
cababan de decir. Luego señaló con el dedo a Waylon y agregó: "Está bien por ahora, p
é", Waylon interrumpió, a la vez
halagador: "Sé que todavía estás ocupada y no te has instalado, pero necesito saber cuándo me
engo una entrevista en el Grupo Patterson. Estoy libre después de
os entonces. Los llev
gre, Waylon abrió l
erior. Notó que había más rascacielos y carteles electróni
. Cambió mucho, ¿no crees?", pregunt
muchí
. Ella bajó la ventanilla y tomó el aire de la ciudad en la que una
al que contaba con un cartel que decía: "Grupo Tate".
anto desarrollo en tan pocos
casa. No pudo evitar recordar las crueles palabras que le dijo y cómo Natalia sonrió complacida
e vuelta, ¡y era hora de que re