Princesa por Accidente
refiere con
a dar la misma respuesta. Vio el reloj y solo eran las ocho de
o a d
rde y pidió que trajeran al médico para que revisaran su herida. También
n temprano. En menos de quince minutos ya todo estaba preparado y fue a sacarse todo el sudor y el sucio del viaje que ya comenzaba a mo
podrá cabalgar por una temporada, tampoco ejercicios f
cias por su
abló. Pidió algunos libros para pasar el tiempo pero no era ni remotamente emocionante como cu
casi le pareció celestial la noticia cuando se la fueron a llevar. Con ayud
io concentrada escribiendo una nota y al verlo ella
dó impresionant
qué viniste? Me refiero
casa. Esta
al terminar su carta y sellarla y la puso en manos de una criada. -Qu
el "señorita" y al ver a Elisa dirigirse hacia
Eres mi esposa y ta
solo le provocó un espantosos espasmo. -¡Ay pequeña! Ven
nimal que seguía de un lado a otro a Elisa. No
a gata siamesa y la acarició un rato mientr
or qué no tra
Me gustan
gato alejado de mí.
onronear Elisa sonrió y eso hizo que John también lo hici
liz
su respon
habitación. Se recostó para descansar y en cuanto estuvo a nada de tomar el sueño nuevam
o. -Dijo el mayordomo entrando par
ra por Elisa no nos enteram
ntenso que casi tosió por que
grave la herida? Hablé con mi marido y está de acuerdo en que vayan a mi palacio para que seas atendido,
sonreír a Viola. -Por favor,
lió con la gata, no pasó mucho tiempo solo cuando el ama de llaves, quien había
nos alegra qu
n el castillo? -Él le tenía aprecio a aquella mujer. Era como s
retó un poco más su mano. -Hay que hablar. Y
mi e
n los votos, John. Ella pasó un año completo esperando por una nota si
la vergüenza que sentía. Sabía que tenía razón. -Pe
sión. Al llevarla a solas sin chaperón la humillaste y dejaste su reputación por el suelo, al irte a buscar a lady Crane estando casado dejaste el nombre de tu esposa en boca de todos y al
efiere
uras y
. -Lena le lanzó una de sus miradas reprobatorias y John supo que e
que ambos podrían encontrar un amor hermoso. Pero deberás esforzarte... Sé que estabas enamorado de o
desde que tuve el accidente y volví pasé varios días pensando en Elisa. Y
cio, estabas ciego y te aferrarse a un rencor inútil, ella no tuvo la culpa de nada y lo sabes. -La voz de l
no vayas a casa de tu hermana, tu matrimonio debes resolverlo a solas, y me temo
rmana está de
debes una disculpa a Elisa pero es seguro que no se l
hermana y su c
rieron, solo podía pensar en Elisa y en qué había hecho todo mal. No sé qué hacer ahora, mamá. Sé que no tengo derecho ni siquiera
mujer excepcional, inteligente, capaz y aventurera igual que tú. No la pierdas. Recupera su amistad y puede que
llaves, solo que no sabía cóm
nciliación? Tampoco, su matrimonio no había tenido siquiera un co