LA CHICA DEL NIGHT CLUB.
cinco días en el hospital por no hacer lo que le pedí, aquí se hace lo que
hacía más que llorar, "es denigrante chicas, perdónen
ho; vamos animo Cloe, debes hacerlo, porque Petra te mata si te niega
e, ella no podía sentirse bien exhibiendo su c
es dar. Dijo Petra riendo, te esperan en el privado och
n el privado te lo quitas, así no te e
bata, no sé que voy a
dejando a una Cloe en dos piezas nada mas, un top diminuto y una tanga, las mas tapa
os ojos, aunque ella tenía un antifaz negro, él pudo ve
on su vida, si está acá es porque le gusta, así que baile, como cualquier puta barata, trate de excitarme a ver si lo logra, las mujeres como usted, no m
sé ni por donde comenzar, las lágrimas de Cloe rodaban p
ow bueno y diferente, no soy de venir seguido a estos lugares, pero la propuesta me pareció interesante, dijo amargamente Sebástian y sabes por qué, porque Sofi estaría conmigo sirviéndome tragos, ella me regaló tu baile privado, no vales ni para la dueña de un lugar como estos, que me regala tu baile, ahora imagínate lo que podrías valer para mi, si te diste de digna la primera vez que me serviste, recuerdas, así que
daré todo lo que tengo en mi cartera, y ¿sabes por qué? Simple, porque yo de iluso te creí diferente, mientras le decía eso tratando de verla a la cara, él reía, pero no de ella, sino de él por creer
ue bailara para él y que le pagaría mucho dinero por un baile, no sabía el porqué, pero lo que aquel hombre
n, era bastante fuerte y se lo tomó sin pensarlo, ella nunca había tomado, pero necesitaba valor para hacer lo que el h
irse al tubo para complacer a Sebástian con su baile, pero sus reflejos no se lo permitían, daba pasos en falso tropezando
evidentemente no, ya ven, siéntate acá, no te muevas mas, le
distraiga con un baile que no tengo idea como hacerlo, es mi cumpleaños, así que este ha sido el regalo que me dio, ser mayor de edad para entretener a hombres como usted que pagan por vernos y
jer, le quitó el antifaz y los grandes ojos café de ella l
debe tu pa
do no vomitar, "lo siento, lo siento" di
r una mujer que querías ver y terminaste sirvi
aja fuerte y llenes uno de los portafolios, te vien
r inmedi
impresionar, nunca va a esos lugares y ahora es el lugar de su prefe
tos, ya Sebástian tenía
que Cloe se recuperara, cosa que no sucedió, le dio a Petra una g
jer le brillaba su mirada con los rollos de dinero que tenía en la man
te debe, me llevo a la mujer de aquí, si pones alguna obj
ue "llévese a esa buena para nada, con esto la deuda está saldada señor Ward, ya Peter de
iga que esta mujer trabajó aquí, si eso llega a suceder, c
para temer, así fuera Petra Orlich, le
vió en la bata, la tomó en sus brazos y la sacó de aqu
r de la chica en el asiento trasero, por momentos sentía que la chica era muy infeliz, después pensaba que podría estar mint
le pasó, porqué la trae a c
ella es una amiga que tuvo un accidente, así que haga algo para que cene, que le funcione para la resaca, ella estará en mi
ella no se despertó, así que la dejó en la cama tal y
vieja está borracha y él de seguro se aprovechó de ella
a, se miró en un lugar completamente desconocido, asustada, se levantó mirand
todo lo que había, una cama suave tendida con sabanas que parecía le daban un cálido toque a su piel, las l
le deje este paquete, puede abrir la puerta por favor;
la viera en las prendas que se encontraba "muchas gracias", dese una buena ducha, el señor Ward la
s señor por la