Promesa Oriental
rincesa cargaba en sus hombros el peso de su prop
a causa de Drew, y era más que evidente que Zashirah, no tenía dolor de cabeza, ni migrañas, ni nada d
le dijo a su gemela en
rar-le dijo ajustando la cin
te sien
uró- Isa, durmi
ya sabes por eso de que Shemir te hizo llorar, ese infeliz- dijo tensando la mandíbula, Zashirah, fijó sus
. luego, ahora tomaré un rápido desayuno y me iré al pueblo, necesi
no puedes e
se miraron fijamente com
sé que sufres y yo...
seas, explosiva y volátil, yo...te necesito- su hermana la abrazó con más fuerza- te necesito mucho, pero no sé si
lágrimas- la abrazó con fuerza- quiero protegerte Zash, no quiero que sufras y él
ada- sabes que... ¿Podemos hablarlo después?- preguntó con ojos llenos de lágrimas que a
archarse. Zahiry pensaba que estar enamorada era como una maldición, Nael y Vanessa sufrieron, Isabdiel
iz, vas a escucharme- dijo pr
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ho mejor, mi niña- le
a descansar, no me siento del todo recuperada- dijo, y bebió
hasta ella y dándole un abrazo- anoche te veías muy cansada, deberí
ó- he dado mi palabra de asisti
tanto te ama, pero eres un ser humano, mi pequeña, también eres propensa a enfe
tervino Ivette, acariciando dulcem
r hoy, ya me comprometí, ahora debo irme o llegaré tarde. Los amo- le dió un beso a
sonriente Ivette, acercándose a su esposo, q
ner al menos diez hi
ir?!- demandó saber, no le
as, en apariencia frágiles, dulces y dóciles, pero la fuerza Norusakistana en ellas, inteligentes, buenas, pero crecieron demasiado rápido, par
mejante dolor, tendríamos diez, veinte, tanto como quisieras- lo miró burlona- mientras tanto, confórmate con tus dos r
de un rostro angelical, no te conoce amada mía,
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alón azul, intentaba concentrar su atención en aquel compendio de leyes pero, nada lograba. Sus pensamientos iban dirigidos una y otra vez a Zashirah, le atormentaba profund
e sus cosas en el último cajón de su habitación. Y a su
niños, si cl
seguramente ella había olvidado su prom
ntraba al salón, frunció el ceño al ver a Zahiry. ¿Có
a Princesa le cri
siquiera poder imaginarse lo que sucedería a continuación, la vio elevar su mano y descargarla con toda
E NUEVO!, ¡NO LO HAGAS!- sus o
- le dijo con ira.
an fruncidos- nuevamente la haces llorar, co
, sólo hice lo que usted me ord
- ella está llorando, desolada, sufriendo y todo por tu culpa. -Shemir la mi
me dijo
ues provocando haré que algún soldado te decapiten, o mejor aún- sonrió con malicia- te ataré y t
se como una tormenta de are
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on múltiples pinturas, los niños a su alrededor se enfocaban en
dibujen lo que les salga del alma, vea
miraba con ojos cargados de admiración- sus pinturas siempre
nte al lienzo en blanco y lo observó por algunos minutos en silencio, comenzó a trabajar concentrada en realizar buenos trazos, buena
z logró asustarla, casi grita
lvió los ojos al lienzo, en donde un
ioso- la ha
rar la vista en la pintura, y sintió como su corazón se oprimió- lo llevaré a