Un amor posesivo.
as
c P
ades puestas sobre mà y tratar de deshacerme de todo el cansancio y la tensión. El dolor repetitivo y persistente persistÃa justo d
do a prueba ahora, sino también la computadora que se ejecutó
rque me estoy volviendo loc
y en otro momento solo pude cerrar los ojos un ra
uela de mis hermanos para llevar a uno de ellos a casa no me sentó bien,
único que tenÃa que hacer, me hizo querer sacar cual
porque si no hubiera sido por todo eso no la h
l mismo tiempo. Todo lo que
i atención de la computadora portátil y finalment
imeros segundos no pude oÃr su voz, ya que permanecÃa en silencio, y sólo en ese momento me di cuenta de lo aprensivo que parecÃa estar, y luego, respirando hondo, d
s un pro
to en que su frase se convirtió en un conjunto de palabras comprensibl
querÃa alejarme de los pro
que se volvÃa imposible, tendrÃa que conformarme con lo que habÃa allà por ah
pantalla de su computadora, que estaba encima de sus piernas, co
o de hoy á…³ Asentà justo cuando parecÃa obvio á…³, y estaba
que concentrarme en entrar en la oficina, se convirtió en una de mis sospechas. Después de
reció? ᅳ
después de un pequeño soltamiento- se puso violenta, frotándola con una
ente ᅳ, fuiste tú quien mató a nuestro proveedor ᅳ luego se quedó en silencio durante unos segu
a él mientras intentaba ignorar las
se esforzaba por no subir el tono de su voz á…³ Mataste a nues
para mà mismo, y no sabÃa que estaba lo suficientemente
prarÃa, y mucho menos dejar que se acercara
nsciente de que estaba mostrando mi irritación. Estaba contradiciendo m
ogas como a todo el mundo le gusta... con calidad, y aún más en lo que puedes confiar ᅳ ne
oveedor ya no confiaba en mÃ, p
ain se inclinó mientras se pronunciaban sus palabras ᅳ Sin mencionar
manera, no iba a dejar de administrar y hacer mi parte en esto solo porque
ocos piensan, esto no puede llegar a elevarse por completo en ti, por lo que tu parte obstin
me dolÃa la espalda. Estuve en una s
me recordó ᅳ No necesariamente tienes que pre
ual
ldwin
bas mientras enfocaba sus ojos en la pantalla de su teléfono celular, lo que habÃa
temprano para Sebas, querÃa descansar -aunque no era un dÃa tan completo como lo habÃa metido en mi cabeza-, querÃa dormir... Pero ya habÃa decidido, incluso ante
es una
rÃa hacerle compañÃa. Después de esos maravillosos dÃas d
da en mÃ, lo que me hizo notar su ceño fruncido ant
No era de extrañar que me estuviera
el color también era genial, pero no era para mÃ. No
cómoda y también se esforzaba por apretar mis muslos de una manera ex
ra su cuerpo hacia adelante y deslizara su mirada por todo mi cuerp
on calma, mostran
smo tiempo que tiraba de ella hacia arriba y, para rematar, estiraba el dobladillo inferi
el otro... ᅳ pensó en voz alta ᅳ
a menos ajustado que este serÃa más ideal para mà ᅳ Pero... no hay problema á…³ Me quejé cuando se me vino a la c
utos, y yo querÃa hacer lo mismo. Tal vez la g
a estudiar y preocuparme. Unas horas de pie en un lugar agradable con una persona ale
lgo -Sebas se sentó en una postura liger
ervioso, sino ansioso, de la manera
ólo para descartar la tensión que i
us cejas y asà respiró hondo, una vez más á…³ Me ofrecieron un trabajo en Atlanta á…³ y... SabÃa que este evento del que estábamos a punto de ser parte ahora, estaba relacionado con la empresa para la que trabaja Sebas, pero no se me pasó por
ectar los puntos, pero también estaba demasiado ansioso para pe
.. ¿A dónde
en tu casa á…³ Yo estaba allÃ, mirando su cara, no
rgia durante mucho tiempo solo para verme, y si quiere vivir conmigo... se convierte en una de las
cia habÃa hecho que mi noche fuera aún mejor... L
.
rsonal del otro, lo que no me gusta en absoluto. Sin embargo, sin duda, lo que más me molesta es ver que Sebas no dijo nada para evi
taba haciendo el hombre frente a mÃ. Al principio de la conversación me pareció muy simpático y, por ahora, es la única pers
a mis horarios. Era tarde y
Ãa delante. SabÃa que Sebas, como es inadvertido, se darÃa cuenta más tarde de que me habÃa ido y, por lo tanto, se preocuparÃa, lo cual no quiero. Pensando en este pequeño punto
allà más tiempo, hoy reaccioné demasiado de forma ex
sostenÃa, ya que escribÃa mientras caminaba, con cuidado de no terminar tropezando con al
pp car -no tenÃa ninguna app de ese tipo instalada en mi móvil, ya que tenÃa coche, per
mano chocó rápidamente alrededor de mi cintura. Al principio imaginé que era
fue
descrito el niño tan pronto como finalmente llegó el adulto para llev
fiesta? - fueron mis dudas iniciales. Nadie se queda
generalmente ya no lo hace, de una manera fija. Como si hubi
me interesa
que el mÃo, hace segundos -, preguntándome á…³ Si te vas, puedo llevarte a casa á…³ sugirió la id
abÃa tenido la oportunidad de contarle y respiré hondo, con la espera
as, pero no qu
levarte
iendo en la cercanÃa. ParecÃa hecho de p
beza, sabiendo también que era una res
una sola parada de taxis, pero no deberÃa
sin moverse ni un centÃmetro-. Vamos -su tono era firme y convincente,
r fa
firmeza mÃnima. QuerÃa apretarlo, pero to
Ã. La fuerza que de repente comenzó a usarse en mi muñeca me asustó sin dud
tra sensación en mi cuerpo; la vergüenza. Y, antes de que abriera la puerta del vehÃculo, me coloqué la pre
espués de que me obligara a entrar, cerrando la puerta del conductor con mucha fuerza ᅳ
a vez, con la esperanza de que entendiera que, por muy
ojos entre esa frase, porque se estaba acomodando y, al mismo ti
o es ne
mientras también lo escuchaba hablar, lo vi arrancar el auto,
ento, recordé que no tenÃa ni idea de cómo se llamaba, ya que también intenté pronunciarlo y no me salió nada
esperaba que saliera una respuesta de su boca. El hombre solo tardó unos segundos en hab
su voz se
vio. Tal vez porque ahora estaba segura de que al menos é
donde, por los momentos que miré allÃ, pude imaginar que encontrarÃa un conducto
ntes más, descendió a mi cuerpo, asà que, también, haciéndome sentir incómoda con su mirada persistente en mis muslos -como si hubiera algo malo a
vestido, esperando ver algo más, pero desde el
demasiado entre la tela de ese vestido, y al final, o cuando pensé que habÃa llegado allÃ, respiré hondo, o al menos lo intenté. Me aseguré de que mis pechos no se vieran y, obviamente, tamb
onzándome de nuevo. También estaba tratando de recordar de qué estaba hablando antes ᅳ, estaba en una fies
à qu
ta estuviste?
ue pudiera terminar mi fras
ómo su cuerpo se endurecÃa un poco, mos
ionar la ansiedad que hizo que mi pecho se acelerara. De todos modos, ¿por qué le
? ¿Cómo
oda costa, pero ¿por qué me preguntaba eso ahora? Es extraño, por decir lo menos, q
Por
con vida, sin siquiera tener que levantar la voz, y
Se
o si estuviera oxidado. ParecÃa estar pensa
Su actitud inquieta indicaba que, por la forma en que
en responder a ninguna pregunta, pero acabábamos
eó las cejas. No p
por qué. Solo que, antes de que pudiera deshacerme de la sensación de duda de una vez por t
Iba a una discoteca ᅳ sus ojos se posaron en mà durante unos segundos, nada suficiente para q
de nuevo, ni siquiera sabÃa en qué dirección ir
sabes mi
or de esta cuadra todo el dÃa á…³ pareciendo que tu tono iba a s
a calle varias veces. No vi una salida más fácil qu