El Esposo del Senador

se

te esto pero… —Ronett colocó su mano en mi antebrazo antes de

s de mi corazón golpearme con fuerza, hasta

una ca

a broma —dije más para

do del otro en grandes muebles de cuero marrón, ella tomando té viendo cada cierto tiempo a sus costados y yo viendo

e hiciese creer fielmente que lo que ella me había dicho de

la dejó pasar mientras yo sol

sabía lo mucho que eso le tomaba tiempo porque yo mismo había asistido con é

pisar su oficina porqu

s —expresé des

en porque después de todo había un hombre llamado Gaspar que ambos sabíamos estaba buscando cualquier excusa para impedir q

en todo, en ab

con tus p

o huir a sus brazos. Eso no podía s

or

n hombre que eres, lo mucho que te desvives por apoyarlo a toda costa y no cr

uié

í, pero no puedo ir contigo

abajando, él solo está trabajando —

hacer sonidos de forma mágica y cuando me encontré con un ci

nos me llegaron directo al corazón y maldije por cómo mi cuerpo comenzaba a sentirse; atrapado, como si

lsaciones aceleradas y mis

ndo la dirección que Ronett me

le marqué, solo me

estacioné a una cuadra fuera del

Apreté mis manos contra el v

peración que sentí cuando mi hermano ingirió aq

tampoco iba a

zapatos, relojes, colonias, comida, salidas inolv

m

mis lágrimas de forma brusca, la lluvia seguía m

, mi mirada buscó cualquier cosa, el recepci

mago. Los nervios siempre suelen causarme eso, así que recu

día verlo ni

é era lo que se suponía

amaba aunque últimamente hubiese estad

e mi pecho solo era causado por lo mucho que me ater

sonas salien

a ma

o entre sus dedos una

con mi vientre esa mañana mientr

notoria cómo él quería deshacerse de su a

llam

r cualquier movimiento Darwin le hizo una seña para que se fuese. Ella obedeció entregándole el

fuese—. ¿Amor…? —comenzó a mirar a todos lados. Yo me hundía en el asiento mientras tapaba la bocina

y lo vi por arte de magia, él enfocó s

e bus

blorosas de la impotencia y el dolor que me

lcándose con una muje

er verlo a la cara y lancé el teléfono casi

a a conformarse con alg

sé es la última en donde hay cámaras así

asta encontrarme y es por ell

nar, porque aunque me queme por dentro no sería capa

go a d

nto que el roce de mis dedos con la parte superior izquierda de

unos minutos hasta tomar la decisión de dejar el au

acerle

o? —me digo a mí mismo tapando mi cara con mis

o es c

de dejarme, pu

te se abu

e hacer

basta —m

vista y las nubes negras se han d

adie. Solo l

ción de que varias personas pueden

cabeza imágenes que

—grita un hombre, seguramente borra

… conozco

a he entrado, pero tal vez debería pasar a distraerme. D

mundo lo

atrimonio en el bolsillo de mi sudadera color melón, e

de perfume para tranquilizarme y lo froto sobre mí para posterior a ello acercarme con u

ando no tan fuerte en mis oídos hace que no se haga tan torme

hacerle

mediato por lo que me siento algo abr

es de mi relación con Darwin, pero no salgo como él en la tele ni suelo usar las redes so

no lo

algo al hombre de la barra, cosa que hace que este le diga otr

amsés ya se va —me dic

ando cosas que no sé descifrar pero t

servido crec

drogarm

te y luego nieg

rotos; esos que vienen solo a mat

es muy noto

e tan consternado que se me es imposible no sentir empatía por él. Aunque cabe resaltar que estoy nerv

vez no sea mala idea llevarle la contraria ¿excusa? Él me juró jamás

s Amser, ¿cu

se ponen algo rojas, y antes de que pueda darse vuelta

z que detuve a alguien para que se

a punto de hacer

mpactan co

n temblando un poco, pero mi cuerpo lo ha hecho también cua

un placer… —su voz gruesa m

osquilleo en mi estómago que prefiero ignorar de la mejor

a para que se s

primera

ve a mí negando con severidad, cosa que me deja con

de esto es que incluso no lo hace de la misma forma en la que recuerdo Darwin lo hizo aquel día ant

volver a sonrojarse y siento de nuevo las

n de hierro, hay algunos mort

ueda notar los pequeños hoyuelos que se le form

uando lo dice y yo desvío rápido la mirada aver

por qué me c

para luego morder mi labio inferior

onca después de unos segund

el hecho de que le dejé claro que la razó

quí…

da se enfoca en mí haciéndome contener la respiración—.

o evita

mi rostro y sé que es

an pa

a vez un vaso de agua y es llenado po

é… —e

do alcohol, así que guardo silencio viéndolo de perfil c

un poco mi taburete del suyo porque la músi

también lo veo contener la respiración por

s que no sé

as observo cuando el hombre de la barra le tira

azón comienzo a sent

poco… —

ue pueda desviar mi vista coloca una

s labios primero se entre abren y luego dan abe

acer esto —me d

ué

a de un tipo q

er cómo ese homb

contien

ina? —Me río

entirlo algo tenso antes de qu

nto me sonríe y asiente para que la to

e sumiso ante la tensión con un desconoc

car porque Elian se ha mordido el labio viendo los m

me importa mu

as manos… —s

ués de las cosas sucias

el se

s algo malo

os ojos —él c

adas se encuentran ha

spués de todas las cosas horr

a rodaja de man

ou

r bastante tiempo ante