En nombre del Amor
tábamos encargados de empezar a entregar un kit para que pudieran disfrutar de la hora loca. Había máscaras de pluma y colores, serpenti
Guetta, mezclando solo como él sabe hacer. Todo el mundo disfruta la fiesta, incluso nosotros que, a pesar de no ba
sperar. Mi mirada fue directo hacia el c
a? -pregunta Edder, dán
n muy lindos los colores -digo,
eo que a ti también. Lis es mi prima, así que tú eras la chica qu
e. Tus ojos hablan por sí solos
e esas chicas "come
almas"? -preg
el alma a mi cuñado Robert desde que se conocieron. No han vuelto a separarse -dice mirándome. Dejo de mirar los fuegos artificiales para detallar sus fa
vio. Llámame mojigata o todo lo que quieras, pero soy fiel creyente del amor verdadero. Como dice mi madre, el
n las bolitas de leche hechas por mi madre. Había probado una. Estaban espectacul
ando la bellísima novia aventó el arreglo, todas se volvieron locas. Pero ninguna podía correr por el ramo, ya que
mi cara pasaba de blanca a rojo en cuestión de segundos
algo. Hoy te tocó a ti ese hermoso detalle. Espero que puedas encontrar al amor de tu vida pronto, si es que no lo tienes ya, y casarte. Te deseo mucha suerte -dice la c
del ramo, mi madre son
ara esto. Perdóname si vas a ten
e no estabas en eso. Relájate.
cuatro de la mañana, nadie quería irse de la fiesta. Los novios se habían marchado hace bastante rato. Se rumoreaba que tendrían un
bía nadie. Mojo mi rostro y retoco mi cola. Abro dos botones de mi camisa. Moría
do? -pregunto, in
sí. Quería hablar co
es? -pregunto, cr
y todo lo que quieras pensar, pero quiero que
to, mientras me
americano, lo cual llena mi alma. Lo mío son las fiestas, los viajes, me gusta divertirme. Soy un chico bohemio, pero mi abuela está muy enferma. El médico dice qu
-pregunto, aún sin poder
ue me tienen atrapado. Quisiera cortejarte y lograr esto. Te pagaré, haré lo que quie
nerme semejante barbaridad. ¿Qué sabes tú si salgo de aquí
s a ser algo mejor. Regálame una cita y, si te gusta, podemos seguir intentánd
odía? Estaba demasiado alterada, así que intento marcharme, pero él es más rápido y me toma del brazo, halándome para quedar pegada a su pecho. En ese preciso momento es cuando dejo de respirar. Sus labios se unen a los míos, dándome el mejor beso de mi vida. Su boca se ab
ojos cerrados. No podía creer lo que me estaba ocurriendo. Me sentía extraña. ¿Creen en e
mor a primera vista? Porque si es así, esto es lo que nos ha sucedido -dice aún sin separarse de mí. Su corazón estaba latiendo a mil y el mío hace bastante tiempo que se había desbocado. Est