EL REGRESO DE ZOE [Libro II]

GRESO

ítu

Joh

en mi piel, no sé cuál es su afán por molestarme la vida. Ya sé que no somos amigas y

rieta más—. ¿Acaso no te quedó cla

n Alex, ¿quieres que te explique lo que

su agarre c

iste está conmigo, no sabes cómo me hace el amor —sonríe y se a

pasado, supéralo, y créeme que no me interesa cómo Alex te hace el amor porque yo sé perfectamente lo que hace sentir,

nocente que podía manipular a mi antojo —se ríe—. Nunca serás como yo aunque quieras, Zoe, y te digo por u

o con altanería—. Y ya deja de atormentarte por lo

túp

r, pero está equivocada porque ya no soy la misma chica de hace tres años con la cual todos

lo que pueden estar hablado cuando ya entró Clarine que estoy seg

..

nos dijeron que solo será por un tiempo mientras se controla su enfermedad. Estoy en la habitación de Evan, me pidió quedarnos juntos. Me quito la ropa interior y camino hast

cosa es capaz de volverte loca, se sienta en la bañer

de que llegamos —besa mis s

alda con lentitud y bajo has

do mi cabeza en su cuello y comienzo a morderlo pero sin lastimarlo, muevo mis caderas y me levanta un poco para poder entrar en mí así que c

unda. Los dos gemimos al borde del placer y hago que se venga, segundo después exploto en un orgasmo delicioso, pero llevo una de sus manos a mi sexo que está húmedo y hago que me toque ahí en mi parte

ndo sin problema. Me pego a su cuerpo mientra

s manos aprietan mi trase

me y nos detenemos. No sé por qué traigo a la mente a Alex cuando me estaba haciendo suy

isculpo con Evan mientras me pongo su

ste a la reunión — se acerca y me da un beso—. Parec

r conmigo a la casa d

quieren hablar cosas personales co

—nos acomodamos en la cama

besa mi frente—. Que

to llegan a mi cabeza, no puede ser que con unos días acá ya tenga mi vida vuelta un desastre. Sa

..

x Pa

cualquier lado para estar con ella y así aclarar muchas dudas que llevo hace años. Escucho el timbre de la puerta y dejo salir un largo suspiro para luego abrir la puerta y encontrarme con Zoe, pens

ne las manos en el pecho para darme un

ndo pienso que se va quitar se gira en mis brazo

? ¿De tu relaci

í—. Creo que debemos hablar de todo lo

—se aleja—. No me has dic

a el jardín. La siento en una silla y me siento frente a ella haciendo

tornan rojas y p

levar y sé que no estuvo bien, pero nunca te fallé porque tú solo me tenías para sexo, nunca te cansabas de repetírmelo y luego terminé enamorada de ti como una tonta. Me destrozaste cuando estuviste con la que se supone e

yo, quise formar una familia contigo y a ti te dio igual, han pasado tres años y nunca has salido de mi cabeza porque te sigo queriendo —mi voz se rompe—. Discúlpame po

instante que perdí a mi bebé —sus

—Me levanto —. ¿Zoe,

ía fatal, en medio de todo choqué con alguien y ese día perdí a mi

ahora entiendo por qué tu cambio y por qué no

ue por algo, Alex y si no me quedé era porque necesitaba estar lejos de ti, lejos de todos —t

ue estando con Clarine te olvidaría y de repente apareces tú

con su cabeza — ¿Por qué me dices eso ahor

a lo amaras porque tú estas hecha

sita y sin que lo espere me abr

estrujo entre mis brazos —. Te he extrañado d

a de mi vida pero regreso y precisamente apareces haciendo que mi corazón quiera salirse solo co

ocupada —. Nunca fue un accidente,

ta una risita —. E

an inocente pero tan sexy que aproveché tu descuido para meterme en tu

, por poco me dejas si

un codazo y alboroto su cabello —. ¡Oye soy sin

uerpo perfecto —bromea. Se queda sería y

i nos queremos e

yo lo quiero, ha estado conmigo desde que llegué a Italia

reocupas tanto

ue mi mej

o quiero sonar grosero pero ella nunca ha sido

o, ¿No crees?

toy dispuesto a luchar por su amor porque la amo y nadie puede ocupar ese lugar que solo le pertenece a Zoe, es la mujer de mi vida y esta vez no la dejaré escapar porque es tiempo que l