La mujer militar

úbra

se es una

na emboscada, s

ix salgamos de

¡La llevaremos hasta la esquina, allá está una torre, po

boscaron aquí, estamos fuera de territorio! Pero como es que

¡O talvez alguien, nos vendió teniente! _ G

general Dana Fénix, una chica de gran corazón. Nombrada como una guerrera. Una mujer que ha s

o donde esconderse. Esteban, yendo encubierto, no entendió como una misión extraoficial pudo s

Era recuperar una maldita mercancía. Una banda mafiosa había tomado el lugar, y el tráfico de humanos y armas se

debió filtrar esa información extraoficial. Tenían un sapo en la base. Ella supu

un lugar hasta poder salir, perdió a unos cua

osas está muy calientes, afuera estamos siendo vigilados! ¡Las cosas salieron de nuestr

llevó a este huerto lo llevaré al suicidio. ¡Estamos enfrentando nuestr

a liderar camino si, ¡n

caron al primer convoy y luego al del medio. Sabían que veníamos. Nos ti

na mafia rusa, las cosas no

el anzuelo. Tenemos que salir de aquí, tenemos que conseguir la forma de

ste camino para salir, sean cuidado

a dos hombres, Felipe y M

, podremos reco

los dejaré allí?! Y

ededor, no sabemos lo que pueda pasar. ¡Opino que salgamos y volvemos a inv

salir vivos tenemos que hacer algo. Tenemos que quitar todo lo que tenga que ver con la mi

igo hasta el final. ¡Si ust

ue el tiempo se ag

práctica. Una Misión, Marco y felipe siempre la acompañaban en toda. Volver sin esos dos sería un duro gore para ella. Ella juraba

dolía la cabeza de solo pensarlo. Tenía que investigar, te

ellos luego de esconder todo lo que portaban pesados que podían dejar. Se pudo mezclar muy fácil, p

las conversaciones de los demás. Se quedó para poder ver, y buscar pista, escucho las conversaciones, los gemidos, las loqueras de los demás. Todo esto para poder identificar una pista. Si algunos de los enemigos están hablando. Se

tipo de negocios. Y podrá conseguir información y localizar a los chicos. En ese mercado no se podía confiar en nadie. Hombre como mujeres todo tenían algo bajo la man

o a una esquina, no entendía, pero vio un h

ocorrer. Miro a los lados y sus ojos cayeron el del hombre, y él se desplazó de su lugar dirigiéndose a ella. Se calmó y salió de la esquina. Lo vio salir de su esquina y esta

chicos, debo barrer aquí es algo peligroso, aquí me huele algo muy p

n hay hombre buscando. Supuso que la están buscando a ella. Noto una tienda de ropas usadas. Entro, eligió unos atuendos y se cambió. Pago

sonríe y le sirve a una taza de té. Ella le habla delo peligroso que es la calle a estas horas. Siempre desapare

me has ayudado. No tengo para darte, mi hijo, el único que me qued

llorar. «Los reportes son ciertos, no hay protección aquí. Sea lo que pase deb

e ella les brindó y saco e

ay señal de

la pista de ruta y la embosq

arcó con Albert, se conectaron para hablar, ellos también encontraron pista, estuvieron cerca, del lu

cuando llegaron volvieron al lugar cerca del pantano no hab

! Se llevaron los cuerpos de los

la señal. No sabía a dónde se lo llevaron, y qué está pasando. Le está lle