¡Eres mía, Heredera!
la
relación con Walter fuera como la que tenían Christine y Bruno, o mis pad
or Barone me está esperando."- le dij
ine que estabas enferma, ¿Qué haces aquí aho
antipática, pero era una de las mejores asisten
para suplir las horas que no asistí."- le dije s
odo. Su mirada me decía que claro que debía de quedarme y cumplir con mis obliga
rone, está aquí Caroline Miller, acaba de llegar a la empresa, ¿La hago pasar? ¿o le digo que ...? De acuerdo señor Barone, aho
claro que, aunque soy uno de los herederos de esta empresa, y de muchas bajo el nombre Miller, este es mi trabajo, y como tal yo d
oz con marcado acento
al entrar se borraron totalmente al ver a la persona que estaba sentada en el
cuando te comuniqué que trasladé la cede central a Londres. ¿No estas feliz?"- me dijo el primer hombre que qui
ercarme al él, y darle un piso
a mandado a un espía para saber de mi vida, y eso, por mucho que me dije que Arturo que no era así, nadie lo iba a creer, ni él mismo. Mis días tranquilos habían acabado, de una manera miserable. Así que los gruñidos de
cipalmente, en lo que podría hacer Roy, para descubrirme. Y terminar de romper así la relación que tenía con mi
ene Roy de ser fiel a los suyos. Mi hermano, tiene una característica muy marcada que, le viene de por defecto desde su nacimiento, la protecci
, y que siempre podría confiar en él. Pero por otro, le daba la opción a asumir, papel
idero como mi hermana pequeña, y finalmente yo, éramos vigiladas por mis hermanos, el hermano de Connelly,
pensar en pedirnos nuestros números de teléfono, o Instagram o lo que fuera. Así de controladas estábamos,
mi tía Kimberly, por mi tío Jason y mi padre, que la verse descubiertos por sus mujeres, muy
irectamente al ser más influyentes de las dos familias, nuestras madre
dije, mientras comenzaba a usar mi tono de voz
uda que mi padre, su marido, seguro estaba metido de por medio, y así a l
a por culpa de Roy, iba a morir seguro, bajo mi man