UN HEREDERO PARA EL NARCOTRAFICANTE
, me levanté de la cama, entre en el cuarto de baño para asearme, me vesti y baje a la cocina par
ignora - me di
¿y el señor?
lo y la señorita Adrianna, antes
orita y por qué se
aria del señor desde ha
antes de casarse con usted señora - dijo uno de los s
volvería antes d
na semana sig
y abri la puerta y bajando las escaleras ilusionada esperando encontrarme con mi marido, pero cuando mire en el salón vi a Giuliano de pie, rodean
necesitas sabes donde e
o te he presentado a
oda, encantada chao
nte Giuliano
- me dijo mientras se ac
consentirte que me s
e, vamos al dorm
pues buscala y sigue follandotela, - l
vaya yo a buscarte o te arrepentirás - me grit
a donde yo estaba mirándonos los dos, me cogió del brazo tumbandome en la cam
arte a ti explicaciones de lo que yo hago, si me quiero acostar
ijo de puta, no te lo
bre bien las piernas como la puta que eres,---
e rompió la blusa que llevaba dejando mis pechos desnudos, sintiendo como sus dientes se c
dio -
el coño - me dijo mientras dejaba todo su semen
o matara a mi padre, pero al mismo tiempo me sentía sucia y ultrajada por mi propio marido. Giuliano salió desnudo del cuarto de
salón para comer y no quieras saber,
nada de ti - le dije cuando me lev
uy nerviosa y me dejó muy desconcertada, porque no entendía ¿como una recién casada podía admitir que su reciente marido tuviera una amante? esa pregunta me la hacía una y otra v
ría que ir a por t
falta que fueras, se ven
invitados a una r
la recepción
iero asociarme con él, tiene una coca colombiana muy buena y me dará buenos ben
ayudar, soy muy buena
su cama sin du
u sociedad piensalo que
ntiendes? y nadie toca lo que
e hombre, como ves te has casado con una Ferrero que también entiende de negocios, al menos que esté
na me ha hecho ganar mucho dinero y adema
na, yo no estoy disponible - le dije levantándome de la
do, cerré los ojos acomodando mi cabeza en el respaldo del sillón imaginándome, cómo le corría el agua a mi marido por su perfecto y musculoso cuerpo, sus manos paseando por cada centímetro de ese cuerpo que yo desea
mientos, viendo su desnudez mientras buscaba en el vestid
, me levanté de la cama, entre en el cuarto de baño para asearme, me vesti y baje a la cocina par
ignora - me di
¿y el señor?
lo y la señorita Adrianna, antes
orita y por qué se
aria del señor desde ha
antes de casarse con usted señora - dijo uno de los s
volvería antes d
na semana sig
y abri la puerta y bajando las escaleras ilusionada esperando encontrarme con mi marido, pero cuando mire en el salón vi a Giuliano de pie, rodean
necesitas sabes donde e
o te he presentado a
oda, encantada chao
nte Giuliano
- me dijo mientras se ac
consentirte que me s
e, vamos al dorm
pues buscala y sigue follandotela, - l
vaya yo a buscarte o te arrepentirás - me grit
a donde yo estaba mirándonos los dos, me cogió del brazo tumbandome en la cam
arte a ti explicaciones de lo que yo hago, si me quiero acostar
ijo de puta, no te lo
bre bien las piernas como la puta que eres,---
e rompió la blusa que llevaba dejando mis pechos desnudos, sintiendo como sus dientes se c
dio -
el coño - me dijo mientras dejaba todo su semen
o matara a mi padre, pero al mismo tiempo me sentía sucia y ultrajada por mi propio marido. Giuliano salió desnudo del cuarto de
salón para comer y no quieras saber,
nada de ti - le dije cuando me lev
uy nerviosa y me dejó muy desconcertada, porque no entendía ¿como una recién casada podía admitir que su reciente marido tuviera una amante? esa pregunta me la hacía una y otra v
ría que ir a por t
falta que fueras, se ven
invitados a una r
la recepción
iero asociarme con él, tiene una coca colombiana muy buena y me dará buenos ben
ayudar, soy muy buena
su cama sin du
u sociedad piensalo que
ntiendes? y nadie toca lo que
e hombre, como ves te has casado con una Ferrero que también entiende de negocios, al menos que esté
na me ha hecho ganar mucho dinero y adema
na, yo no estoy disponible - le dije levantándome de la
do, cerré los ojos acomodando mi cabeza en el respaldo del sillón imaginándome, cómo le corría el agua a mi marido por su perfecto y musculoso cuerpo, sus manos paseando por cada centímetro de ese cuerpo que yo desea
mientos, viendo su desnudez mientras buscaba en el vestid