Casada con el cruel millonario

a supuesta isla Harrington, no sabía que tenían una, fanfarrones. Tien

do el dispositivo de manera fácil y rápida, solo tuve que esperar que la anestesia haga efe

recioso, no hay personas, solo nosotros dos y un puñado de vigilantes. Bebo de la botella de

realment

ere no es un cretino. De hecho se ha mostrado atento, aunque distante. No hemos hablado,

uyos, claramente por el asco que me tiene. ¿Para que carajos ex

recuerdo cuando vuelvo a la cama ni como hago para

borracha

y no quiero volver, viviría muy feliz en esta i

e me bebí todo el alcohol que tení

entro en la cocina a Alexander prep

om

y un vaso de jugo de n

Lo neces

ndo su mano y me t

a esposa que me avergüence ni tampoco quiero volver a llevarte a la cama otra ves. La próxima vez te dejare durmien

me llevo él. Se ve furioso ¿Sera por e

ayas aprovechado de mi m

esita algo mas que alcohol

omer. Después deja un plato con frutas picadas y recarga el v

no me gusta la necrofilia.—Res

los pozos azules de sus ojos que

í?- Me hace sentir te

comida y se sie

ó anoche? Es decir ¿no recuerdas

oche estuviéramos hablando. Mis ojos traicioneros van a sus

sta este

do nada. ¿

su plato. Hasta que termina y recién levanta la

decirm

Su rostro igual de inexpresivo, pero sus ojos, los músculos de sus brazos ten

N

Recoge mi plato y el suyo para

ya ofendido gravemente. Desde que apareciste en mi vida solo me has hecho pasar moment

sta es la primera vez en tres semanas que nos dir

ía. Borracha eres muy des

vez es el mismo Alexand

rió. No soy capaz de haberle pe

algo como eso? No me agradas y eres el últ

se cruza

es lo que me demostraste esta madrugada cuando te lanzaste a mí. Dice

pega al mío y rodea sus brazos por mi espalda, inmovilizándome mientras

é ha

arto y junto coraje, mucho coraje para abrir mis ojo

ho mas y amenaza con estallar o detenerse, ya que el aroma de mi

ebo mi

de su agarre sabien

nti

ayúdenme a no flaquear, la tentación es muc

, suéltame

ca y ese error hace que sonría,

estas nerviosa porque tu cuerpo acaba de delatarte. Asique dime, esposa. ¿Seguirás

inteligente, pero, no puedo con

ora te odio

ntre sus brazos y la dureza de su cuerpo. ¿Esto está mal? Sí, pero no me importa. Darme cuenta de esto deb

ra me toma del cuello para profundizar el beso, mi boca se ab

exige ser manoseado y atendido por

iernas para que quede en medio de ellas. No debería

expuesta, Pellizca, jala y aprieta a su antojo y no le digo n

nto, estas muy h

haz tu trabajo, veremos si

que puedo y m

o es tan impresionante, tienes la bo

jugar ese

o caminas de