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Mi trato con el millonario ruso

Capítulo 2 Capitulo 2

Palabras:2028    |    Actualizado en: 02/07/2024

cuello, bebi

os bajo lentamente y trazo el patrón de su sujetador. Su respiración se

stómago desnudo y delineo el largo de su falda. Es ajustada. De poliést

surro en el cuello, dánd

das. "No... no puedo", tartamudea, con vo

y cuando mi mano roza la tela de satén de sus bragas, ella gime. El sonido me

muro con voz baja

perder mi trab

o con los ojos venda

tes había hecho

hasta formar un nudo antes de soltarlo. Golpea contra su piel y ella salta, luego gime suavement

onsigo misma, dividida entre su deseo y su moralidad, entre el calor fe

necesita una droga. Me doy cuenta de que quiere que la co

espiro profundamente, saboreando el momento. Mis dedos, todavía tem

sas. "Nadie más necesita saberlo, solo tú y yo. Esto no irá más all

ptiva, tan sensible. Me muero de ganas de explorar cada centímetro

tra su piel-. Mañana, tú volverás a tu vi

pper que me hizo caer de rodillas. Pero las palabras parec

a noche", rep

s. Ella jadea mientras tiro hacia abajo de la parte delantera de su sujetador, liberándol

oque. El ruido que hace hace que mi polla s

ras delgadas y piernas largas. Anhelo verla correctamente, deleitar mis ojos con su belleza, pe

papada y gimo ante la prueba de su deseo. Lentamente, deslizo

e contra mi mano. Agrego otro d

nturón y los pantalones, liberando mi polla. Estoy duro como

que están empapados. Me inclino y capturo su

-murmu

, me posiciono en su entr

su resistencia. Frunzo el ceño. Pensé que ya estaba lo s

nuevo. Rezo para que su respues

vor. Sí -su

lacer. Empiezo a hacer círculos con mi pene dentro de ella, tratando de llegar más profun

trar completamente. No puedo evitar dejar escapar un gruñido

ella deja escapar un jadeo agudo y

zando a empujar, todavía encontrán

diferencia, pero yo.

n voz temblorosa, me recorre el cuerpo. Quiero salirme, tranquilizarla, arreglarlo. Pero no hay vuelta atrás. No

uera de control. Todo el deseo que he estado

ma de evitarlo. No es solo una d

te duele demasiado, solo

los alrededor de mi polla con su coño,

la quiere q

de mi polla dentro de ella. Mientras empujo más profundamente, ella suelta un jadeo agudo y sus dedos se cl

vía está apretada, pero ahora se siente como un guante cálido y húmedo envolviéndome. No p

do, mi ritmo se acelera. S

palda. Estamos en el mismo barco. Estoy tan cerca. La tensión aumenta durante lo que parece una eternidad. Quiero

s, controlando el ritmo y la

uertes. "Oh, Dios mío. Oh, Dios mío

bajo por mi polla con cada embestida, la humedad de sus pa

ril de liberación me invade y sé que no podré contenerme por mucho más tiempo.

verme

se aprietan alrededor de los míos. Agarro sus caderas con más fuerza, embistiendo más rápido, tratando

iona y ella deja esc

la, con la voz ca

necesitaba. Con un últ

e derrama en sus profundidades. Siento que sus músculos se tensan a mi alrededor, o

mos se desvanece, me retiro y

la oscuridad para alcanzarla. Siento su cabello

rra-. Gra

asiado abrumado por las consecuencias d

sudor y los mechones sueltos de la cara. Ella sigu

labras contra su frente, sintiendo el calor de su piel

n la voz apenas audible, temblorosa po

pero para mí fue perfecto. Me inclino y capturo su boca en un tierno beso. Estoy a punto de

diciéndome que el

e voy", dice, y antes de que pueda reunir el coraje para

*

ron en la habitación,

grita Justin. Led y Rod se acercan y

estuvo?", pregu

jo de hombros y man

rótico. Fue com

ás tiempo del que pagamos, per

uen baile erótico? -

mirando a Rod con el ceño frunci

do -me guiña un ojo Nels

a Led con una tranquila determinación en el rost

-. No pasó nada. Como dije

bien. Ahora, sigamos con las celebraciones -dice R

*

a y continúo la fie

gunto dónde estará ahora, qué estará hac

hica. Fue una distracción agrad

. No puedo contener el deseo de buscar

s, trato de echarle un vistazo. Me pregunto si es

acer mi profundo deseo de volver a verla. Corro al baño y saco unos cuantos mile

stá Hada por aquí? O

noche", dice, p

uieres? -respo

lo. De todos modos, era una ilusión pensar que e

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