Un Matrimonio Inesperado

tiste que cuidarías bien a Selina. La situación ha cambiado enormemente, pues la familia An está en la mi

ola. Por lo que mirándola extrañada, intervino: "¡No finjas que

es para caminar hacia la puerta,

bloqueó el paso. "No tan rápido. No puedes irte sin

odría un hombre tan famoso y de tanto prestigio como él permitir que s

os matrimoniales? Si ya habían terminado, ¿por qué le estaba ordenando abortar? "No,

de aquí!", le gritó

a náuseas. "Yo también estoy embarazada, Ezra, de ti. Así que, por favor, no hagas nada, aunque no estemos seguros de quién es el padre de esa criatura que ella lleva dent

de que esta mujer causará problemas tarde o temprano, y el bastardo e

r la misericordia de Dios que pude verte de nuevo, y prometí ser una persona tolerante. So

ía estar bajo el hechizo de esta ch

quen a esta mujer de aquí! ¡Llévenla al ático, no

que ella estaba haciendo esto a propósito. Era tan simple como que la quería a

ela, la joven se negó: "¡No! ¡Manténganse alejados de mí! ¡No me toquen! Si alguien se atreve a acercarse, ¡me mataré! Ezra,

oven se ensombreció. "¿Qué están

a espalda antes de que Selina pudiera huir. "Por favor, señora

ro y polvoriento ático de los Lu. La pesada puerta de la habitación se cernía sobre ella como un guardián descomunal,

, pasaron nueve meses en

señora Lu está a pu

o es posible un parto normal. ¡

ía ser muy arrogante en su día a día. Por lo que verla sufrir fue extremadamente sat

n busca de aliento. "¿Qué demonios planeas, Viola? ¿Por qué estás haciend

Incluso la había amado como a una hermana, defendiéndo

le tendió

que siempre me has tratado como a tu mascota. Te sigues convenciendo de que eres una gran amiga para mí cuando todo lo que has hecho es hacerme parecer una idiota que no pue

feriría morir antes de traicionarte de esa manera!". Francament

e aceptando su destino, decidió mantener las distancias. Para ella, su

, y aun así decidiste usar mi vestido de novia! ¡Lo obligaste a casarse contigo! ¡Perra maldita! ¡Te detesto

"Mátame. Mátame ya, Viola. Si no lo haces, volveré algún día a buscar mi venganza.

palabras, Viola e

hó por mantener los ojos abiertos y fijos en la otra mujer. Pues si moría en sus manos le haría reco

o seguido, se rio en voz baja para decir en tono amenazante: "¿Matarte? Es

veló la parte más

ie lo creería. El niño crecería despreciad

erior de su cuerpo extendiendo la mano para agarrarla,

rialdad: "¡Inyéctenle alguna oxitocina! ¡Tiene que tener un parto normal! ¡

uerte horrible", amenaz

o se dedicó a ver cómo le apli

n los gritos de dolor

lió. Pero... esper

ño, y murmuró: "Es un bastardo. Tal vez ya lo sabía y por eso acabó

do estirar el brazo hacia

s, quizás te muestre a tu be

n fuerza, fijando su mirada llena de furia en la mujer que pen

la dejó al chico en

se quedó en silencio junto

aba negro. Debió morir

una mano hacia el pequeño, sin cre

amante está muerto. Esto es lo que recibes por tu infidelidad, Selina. Tus manos están man

lla comenzó a sollozar en silencio y a negar con la cabez

osib

u hijo! ¡Este