SEDUCIDA POR EL CHICO MALO DEL CAMPUS: UN HOMBRE LOBO
había tenido que lidiar con gente desagradable, sino que ahora tenía que soportar una clase sobre mitos y leyendas que no me provo
manera de hacer pasar el tiempo más rápido. Mis dibujos no tenían sentido, eran solo una mezcla
esada en la clase. Le sonreía de vez en cuando, pero mi mente e
o de la clase, ahora se había tornado oscuro. Las nubes negras se arremolinaban ominosamente, y u
e había presentado como Lucas más temprano. Estaba apoyado contra el tronco, con una actitud despreocupada, fumando
aire misterioso y rebelde, con su cabello desordenado que caía en suaves ondas oscuras sobre su frente, enmarcando su rostro de manera despre
pudieran ver a través de las personas. Todo en su postura y actitud gritaba c
é inmóvil, sorprendida y avergonzada por haber sido descubierta observándol
mis cosas rápidamente, deseando s
-preguntó Sara mientras
e aire fresco -respondí
tarde nos recibió, trayendo consigo el aroma de la lluvia inminente. Las nubes
preocupada como si estuviera esperándonos. Tratamos de ignorarlo y continuamo
, observándonos con una leve so
de incredulidad-. Si no nos hubiéramos reg
beza y su expresión
-dijo, cruzando los b
llo de Lucas y lo besó con familiaridad. Me sorprendí al ver la escena, espe
Lucas, nos señaló y empe
el anuario -dij
nuario? No entendía a
bién parecí
suele encargarse de es
pondió con una lev
a
e di cuenta de que había algo más profundo en sus relaciones. Parecían formar parte de un grupo cerrado y exclusivo, donde cada uno desempeñaba un papel específico. Era como si
a. Dentro, había varios papeles robustos g
reguntó ella, m
ra mí. En lugar de la tinta clásica negra, contenía una tinta marrón oscura que parecía casi
mente haciéndonos parte de la conversación. Nos mostr
ense, po