El ardiente capricho de la CEO.

enzi

rque de bomberos

cuando bajó todos esos pisos, cargándome sobre sus hombr

desmesurada por la sorpresa, al mismo tiempo que yo asistía impotente, como mi mirada, por voluntad propia, y sin ningún co

claro que debajo de ella, mucha flacidez no ibas a encontrar. La camiseta era igual a la que llevaba el otro bombero, de color blanco azulado, y como el otro, también llevaba las letras en

ero casi me hace quitarme las gafas de sol, para comprobar que no era una ilusión óptica, lo que veía, e

alquier gobierno salvarían, para repoblar la tierra, en caso de qu

es, aquí estamos demasiado ocupados, para aguantar a psicópatas deslenguadas que tiene más dinero que razonamiento."- esas fueron las

ternativa."- pensé antes de que, en un arranque de furiosa me quitara las gafas de sol para enfrentarme a ese g

o hubiera hecho, sin medir las consecuencias, era dejara salir esa parte de mi carácter inconsciente y explosivo, heredado de la señora Céline O ´Sullivan, que

ndo

rque de bomberos

la lunática pude oírlas mucho antes de lleg

sentarse?"- si no hubiera oído eso, quizás hubiera sido un poco más razonable, hasta comprensivo, aunque s

era vez que la vi, se dirigió a una pequeña pelirroja, cuyo cuerpo podría provocar más de un accidente, y eso que estaba en estado relajado, ni me imagino el desastre que podía hacer esa

o. Sus ojos estaban cubiertos por unas gafas que sol, e inconscientemente, deseé quietársela para saber si el extraño c

idiota lunática pelirroja ya me provocaba, sólo con su presencia, así que deje salir todo mi mal humor de la única forma que

aro que nos estoy para aguantar más estupideces femeninas, un tono que, con dos hermanas gemelas,

que yo estaba allí, y me miró. Por un segundó todo se quedó en silencio, mientras ella se paralizaba. Sabía que me estaba observando detenidament

ngrata belleza que esa mujer poseía, pero para mí había dos claras razones por las que no la hacía

ntos atrofiado, hasta el más pequeño de los animales, cuando se veían en peligro, huía

y desde luego después de lo que le paso a mi madre, con las personas que le dieron la vida, que la querían obligar a dejar el amor,

on recodar la acción que hizo de, antes de por proteger su vida, fue a salvar unos contratos, confirm