Dos Corazones, Un destino
, era el centro de su mundo. Aunque mantenía su imponente presencia como CEO de Montgomery Enterprise
than estaba revisando documentos en su oficin
scuela hoy? -preguntó el niño, con s
ado a la insistencia de su hij
ó, refiriéndose a la niñera que solía
tú. -Liam puso su mejor cara de
a un lado y suspiró, sab
no esperes que pa
a buscar su mochila. Ethan lo observó con una sonrisa. Por momentos como
_____
in parar sobre su día, sus amigos y lo emocionado que
as bajaban del auto-. Quiero present
puerta del auto-. Muy bien, pero que sea ráp
hacia el aula. Cuando entraron, el bullicio típico de un grupo de niños de seis años llenaba la sala. Liam sol
mó Liam-. ¡Mir
ah era idéntico a Liam. Su cabello, sus ojos, incluso la forma en que
Noah con una voz tí
todavía tratando de proc
ce que tú y Liam
igos -respondió Noah c
algo más, una voz suave pero firm
r, tomen asiento.
nte a la pizarra, con un libro en las manos. Su cabello castaño estaba suelto, cayendo en suaves ondas sobre su
go en ella que lo desconcertaba, como si la conociera de algún
entrada del aula. Era imposible no fijarse en él: su porte imponente, su mir
dio un paso adelante, tratan
ntgomery, el
o nerviosa. Había oído hablar de Ethan Montgomery, el i
ery. Soy Isabella Hart, la profesora d
r conocerla. Liam hab
niños. Su paciencia y ternura eran evidentes en cada movimiento. Pero también había algo m
us pensamientos al
un poco más? Quiero qu
Podría retrasar la
, pero solo
o en la forma en que Ethan miraba a su hijo que la conmovió. Era e
go extraño estaba pasando. La semejanza entre los dos niños era innegable. Y aunque no que
o una extraña mezcla de intriga y atracción. No podía negar que
auto, las palabras de Li
s mi mej
eriguar más sobre ese niño..