icon 0
icon Recargar
rightIcon
icon Historia
rightIcon
icon Salir
rightIcon
icon Instalar APP
rightIcon

Bajo la sombra del Poder

Capítulo 4 El Juego de Poder de Alexander Cain

Palabras:1062    |    Actualizado en: 16/12/2024

stuosa de la ciudad, eran un recordatorio constante de su posición en la cima. Pero en ese momento, mientras revisab

e a su rostro. Había sido un movimiento calculado permitir que ella ingresara

do, Isabela? -murm

había sido un obstáculo en su camino, una barrera que debía ser eliminada para que su imperio alcanzara nuevas

un cabo suelto que debía haber sido cortado hace dos años. Pero Alexander no creía en la suerte ni e

oficina, interrumpie

orme completo sobre los movim

rpeta, hojeando las

-preguntó sin le

altieri. Lo abrió, pero no tuvo tiempo de

golpe y se levantó de su silla

uien es, tarde o temprano c

? -preguntó Dominic, con

ente, sus ojos grises

No interfieras, a menos que

o que Alexander prefería ma

de que no tenga acceso

dido,

frente a la ventana, observando la ciudad

bía estado durante los últimos dos años, cómo había sobrevivido, y cómo había llegado a postularse pa

un movimiento rápido, sacando un sobre grueso. Dentro había fotografías de Isabela en diferentes momentos

un parque con una expresión perdida. Había algo en su rostro que le r

pensó. "Pero eso podría ca

Sus días estaban planificados al minuto, y cualquier desviación era un lujo

nte personal, ent

de la tarde. También, el señor Bennett solicitó un m

penas levan

pere. Tengo otros asun

prioridades cambiantes de su jefe

ri llegó hace unos minuto

ro la mención de Isabela l

mprovisada con Isabela. Quería observarla, ponerla a pru

botón en s

eri, venga a mi

on una carpeta en la mano y una expre

días, se

una silla frent

ént

ndo la carpeta en el

frío pero medido-. Ha hecho un buen trabajo organizando mi agenda y manejand

, sorprendida p

ajo lo mejor posible, señor. Quiero

cabeza, como si ana

a cualquiera. Cain Enterprises no es un lugar para apren

, aunque sentía que sus m

toy dispuesta

u silla, evaluándola en s

Vuelva a

amente. Había algo en ella que no cuadraba, y aunque no

más documentos, Alexander r

a cuenta de usuario de la señorita Valtieri. Parece

a no lo s

ue comprometa la seguridad de la compañía.

memos alguna me

aunque no había ca

que juegue

a ventana. La noche caía sobre la ciudad, y con ella venía l

dispuesto a asegurarse de que cada paso que ella diera fuera cuidadosamente vi

Obtenga su bonus en la App

Abrir