Bajo la mesa del jefe
y por primera vez me
lvira. Me dijiste que querías e
erios ojos y me ahogu
lo
res." Observó mi reacción con atención. "Verás, Elvira, me encanta el sex
s y simplemente abrí mis ojos. No podía creer lo que oía, ¡per
rlo después de lo que he aprendido. Ella está como... para mí, manchada por alguien. Ella me ha herido. Aunque todavía la amo, y debes recordar eso.
El hombre con el que soñé durante tanto tiempo, que era
tiendo. Aunque es
ción, debes prometerme algo. Primero, nadie debería saber sobre nuestra relación, incluida mi esposa. En segundo lugar, aceptas voluntariamente dicha relació
Lo entiendo, Edward
con todo?" Me
." Co
iel de gallina. Luego pasó su lengua por mi dedo, y actuó sobre mí como un trapo rojo para un to
es, los puso sobre la mesa
am
?" Yo p
as. Pero que así sea. Con
a estaba en la puerta, así que tuve que
el auto, me at
ahora
, y debes obedecer inmediatamente. Repito de nuevo: me encanta follar, y muchas veces
. No me atreví a romper el silencio, dándome
, el deseo llenó mi ment
de mi jefe. ¡Él se convertiría en mío! Y como su esposa prácticamente lo
a razón en algún lugar de las profundidades de mi mente. Inmediatamente
ión, Edward cerró la puerta y se volvió hacia mí con un extraño brillo e
una mujer en el mundo que me pu
e se hundió sobre mis piernas hasta el suelo. Me acerqué a Edward, admirándolo y sin creer lo que veía
y no me agarró por los hombros, sino que sólo observó mis acciones. Toqué su cuello con mis labios, pasé mi lengua po
bre me mire con tanta indiferencia! Le quité la camisa, luego bajé rá
despertó en mí. "¿Entonces dices que te gusta el sexo?" Me
e ya no le presté atención al propio Edward. Mi tarea era finalmente levantar este órgano indiferente, y después de cinco minutos ¡lo logré! Comenzó
r rastro, y parece que a mi jefe le empezó a gustar.
Edward se volvieron rápidos y agudos. Las lágrimas aparecieron en mis ojos, no había aire que respirar... ¡Me llenó c
er sin precedentes sobre él. El hombre sostuvo mi cabeza y se quedó así, con su polla en mi garganta. Respira
re fresco y tosí. Mi garganta empezó a doler mucho. Edward se
o la dureza y la impetuosidad en el sexo, amo que me obedezca
ertada, tomando
veré esta noche. Hay algunas cosas que debo
mirada expresiva antes de irse. ¡Me di cuenta que hoy obtendr