0.1 Cerca del abismo
T - UN
prácticas, de sus padres. Dice que hay cierta edad -no digo cuál es porque apenas si escuchab
s, doce tal vez. Ellos me dijeron que si no asistía me enviarían de nuevo a un pedófilo como niñero
uerza y sin fuerza poco se puede hacer, sobre todo cuando hay dos monstruos que en serio podrían matarme si se l
sto que no podía no estar presente la violencia entre los tres. Quién sabe cómo hicimos para llegar a destino: una casa abandonada perfecta para funcionar como casa embrujada en Ha
aban rodeadas por tipos y otras dormidas en sillones o siendo arrastradas por
sé que era ese sitio. Como no quiero d
ientras escribo esto porque aparte de alcohol ahí se inspiraba otra cosa que hasta ahora me da nauseas. No sé la verdad
endiendo la jerga en medio
hijos de puta se fueron tras unas chicas. Como no sabía qué hacer y tampoco estaba en esto
e violarme o escondido en mi cuarto mirando la nada con un palo de escoba, cuchillo en fre
n de mí y no les importaba maltratar a las
s secas alrededor de su cara. Era como ver una muñeca maldita, rota, abandonada. Los sonidos por alguna razón ahora son
i mente y salí corriendo de la casa embrujada. No era tonto. Mi cuerpo era el de un pequeño en sus buenos y d
ío mientras estábamos en el au
lor llegara a chocar con mí cuerpo y así usar mi arma en contra suya. Salir corriendo iba a ser un problema,
olo sujetaba el chorro de sangre que salía de su estómago. Quizás lo miraba, quizás sonreía, pero no dejaba de admirar la manera en que esa basura se
é un halo rojizo deambular por ahí. No sé por qué recuerdo todo como si fuera una masa sin color, al menos de los alrededores, per
das de la inocencia en su cuerpo, y la manera en que vestía, despreocupado y colorido, hacía fruncir el ceño porque no se sabía muy bien qué pensar ace
ecuerdo, pero sí sé que vi
por lugares desiertos, disparando hacia tronco
recuerdo que d
de ahora tú y yo
é? -le p
sabía si nos volveríamos a ver de nue
él me c
mos hijos de monst
unos secretos y cómo es que acabó en ese lugar. Supongo que en ese momento estaba feliz porque no me
usadas hasta el cansancio o la muerte, la verdad no se podía distinguir cada cosa. Lo que recuerdo
aprender de ellos, debemos volvernos fuertes y así log
ero por primera vez en mi vida alguien estaba cuidando mi espalda, aunque solo fuera por uno
mi cabeza quedaron grabadas, pero la más importante
de algo mucho más retorcido y raro. Todo en mi vida fue retorcido y raro, una mierda, pe
ue tuviera un problema neuronal o me haya drogado, sino por
os se fueron convirtiendo en algo que pronto sería imposible ignorar y que incluso en