Emely.
su teléfono y lo encendió, no fue hasta ese momento que se dio cuenta de lo que pasaba ''¿Dónde estoy?'' resonó en su cabeza. Se levantó rápidamente y un fuerte dolor de cabeza le
én es?'' se preguntó. Se vistió y salió rápidamente del cuarto d
en la puerta del conductor ''¿Qué diablos paso anoche?'' volvió a preguntarse. Ent
o único que recordaba es que hablaba inglés. Su tez morena, cabello rubio y ojos verdes le habían seducido; un beso aquí, una caricia allá con aquella hermosura y
Ring,
nterrumpió su
l West, ¿Qué de
!? –se escuchó una estridente voz qu
somnolienta – creo que estoy en una especie de h
su auto y condujo directo a su agencia ''Hotel Para'' vio al salir del estacionamiento, al menos ya sabía dónde estaba, Mark no est
trataba de recordar que había pasado; un bar, unas copas, unos cuantos jugueteos y
s de su agencia se dio cuenta de que
ón por favor –pidió el
cial de campo –dijo mos
nalizó abrien
a empresa. Se dirigió de prisa hasta su oficina donde le esperaba su compañero Mark: un hombre alto, caucásico
ludaba con su apodo cariñoso no estaría tan eno
espondió – ¿Cuál fue esta vez?
es –respondió Apri
s de ayer querida –resp
hoy? – preguntó, en un acto d
tienes el expediente -dijo extendiéndole el folder con la informa
dad? –preguntó co
rimero debes ir a cambiarte y asearte, ve
–se despidió ag
salvado de la sanci
i padre –respondió Apr
ndome loca'' dijo riendo en voz alta. Caminó hasta su armario y buscó ropa limpia para ponerse, rebuscó por todo el armario por algo de ropa limpia, ¿Hace cuánto no lavaba la ropa? Se tuvo que conformar con las únicas piezas de ropa limpia que quedaba, una camiseta de seda blanca y un pantalón ajustado color azabache, se ató el cabello en un moño improvisado y tomó sus
est –dijo Mark con
me invitaras a
st, vamos al restaurante de
partir hacia el pueblo. En el camino por miraba la ventana sin despegar la vista del horizonte, era un día soleado ni una sola nube se visualizaba en el panorama, ´´Debe de hacer
eguntó Mark topando l
sé –res
ismo le perseguía a cada paso que daba seguidos de escalofríos; al acercarse a la casa dond
ó el guardia frente a
y April West –dijo Mark m
tos volaban de aquí allá, no pensaba en nada en específico,
? –pr
ificación
o. A cada paso que daba el nerviosismo se intensificaba, llegando a tener nauseas. Allí estaba la pista qu