Trabajando en la granja
s, que no sé cómo describirlos, papá nunca me había tratado de esta manera
a me miró de esa forma, llena de desagrado, de niña nunca me reprochaba o recri
forma de actuar era diferente, su actitud indiferente hasta el p
era, no pensé que llegaría al punto de querer que me fuera de la casa, o cómo lo llamó mi padre de manera tan el
r, que es lo que quieres hacer -. Trató de buscar su lado racional, tal
estaba dispuesto a todo y esa determinación se mostró en su rostro cuando habló. -No estoy equivocado
a de impotencia. Cualquiera de las dos opciones determinarían, un camino diferente en su vida, que no estaba di
ofundo acompañados de una largas pestañas y una cara y nariz finas, su piel blanca que hacía que sus labios rojos resaltaran más, así que por
el, lo utilice y cuando ya no lo necesite lo tiré, cómo si fuera basura, no estaba en los planes de Maya. Aunque ella nunca ha tenido una relación, si conoce este tipo
dos, siempre fracasaban. Por consiguiente mi madre no pudo soportarlo y decidió buscarse un hombre rico, que pudiera darle todo lo que mi padre no le dio y que a su vez
aso empresarial, le agregamos la presión que recibía por parte de su esposa, que en un mundo perfecto debería ser
bición en la vida, vio todo fracasar al conocer a la mujer equivocada, que hizo que mi padre vendiera todo lo que poseía en la zona rural y saliera hacia la ci
que nadie le vuelva hacer sufrir, cómo lo hicieron en el pasado, sin tan soló supiera que me
a segunda opción, ya que si decido trabajar, lo puedo hacer en la empresa de papá, estoy segur
esa?, por supuesto, tendré un puesto de
la compañía-. Dijo él, mientras, mirab
e reflejaba su rostro, ella excl
pero entiendas, que todo lo hago por
. Mi voz, ya no puede, contener el enojo, pie
iones-. Dijo tentativamente, para ver cómo
de escuchar esto, Maya no pu
te la razón!, no entiendo el raz