Oscuridad ©

, día

sto, no suena en nada como lo hace mi despertador, pero me veo obligada

lejo y me desperezo y estiro cual floja- Mira que eres una gata cuando te despiertas –El golpe de la almohada me da de ll

plan familiar. Por lo general, mamá es la que

o suena, el señor Altermayer q

ne nada q

mi habitación. Decido dejar mi cabello sin lavar para no demorar más de lo que mamá pueda tolerar y busco ropa cómoda con

y larga, me dispongo a salir de mi habitación cuando siento

a Xander con ropa deportiva negra y un morral

cómo debo saludarlo, así que levanto

ol

ceja señalando mi ropa.

a familia

de su cabeza- En realidad, pensaba que querrías venir.

asar el día en familia. Amo a mi familia, pero mamá se preocupa mucho por lo

odemos hacer

ndo, quiero hacerlo,

tu plan familiar. Mira, hacemos esto de vez en

hay de

olidos, créeme que mañana no serviremos de m

ncant

encia. Estaba demorando mucho. Suspiro con pes

n su lugar y trato de ignorar las mariposas que vuelan como locas en mi estómago-

emos,

onos una pelota. Ella no está de acuerdo con que yo juegue como si fuera un niño más, ella prete

con su cuerpo alto y que se aprecia bien formado, tonificado, fuerte. Sacudo la cabeza y suspiro, no debería estar pensando esas cosas de Xander, la idea es que soy una niña en todo el

ápidamente hacia William. Mamá resopla audiblemente y papá también lo hace. - Wendy, cariño, no te

rada. Aquí vamos- Wendell, Anahia es una niña y esto solo la h

us dos pies –Papá gruñe y esto solo se va a poner peor- Anahia es una niña, se comporta como una, viste vestidos, tiene amigas y en su época jugo

que ser dign

ero que un chico que salga con mi hija, es. No entiendo esta actitud y ganas tuya de meterle al chico Whedermell por los ojo

que Marcus es el mejor para Anahia, pero

iente,

ese boleto y Sofía también lo necesita- el hecho de que haga deporte no me hace ser una niña amachada, me gusta hacer deporte y pasar tiempo con mi hermano, también me gustan los vestidos y cosas de chicas, así como tú quieres, tengo un equilibrio entre las dos cosas –Mentira, sé perfectamente de qué lado se inclina la balanza, per

azo por mis hombros y deja un b

seguir. –Resignada, mamá se deja caer en el

, día

ltermayer en todo su esplendor, paseándos

alguien a quien acaba de sacar de la cama sin darle a tiempo a pasar

do a otro. Parece que no sabe qué decir, o no encuentra la forma más adecuada de hacerlo

cúpelo, s

sición en la que pueda dormir mientras ella se decide a decirme lo que sea que quiere decirme. - No te duermas –Vuelv

¿Q

llama mi atención y bajando las piernas del l

ofesional

Explica ella como si fuera

–Ella sonríe como si le hubieran hecho el mejor regalo en todo

dós de Marcus –Mi gesto se contrae en desagrado.

n echarle un vistazo a la tarjeta, no me interesa. Se

recibieron invitaciones, así que esta noche iras con tus amigos a divertirte en la fi

No soy mayor de edad y lo sé, pero tengo derecho a mi intimidad, además ¿Esta noche? ¡Pero c

do que usaras –Mi boca cae abierta con sus palabras- Y si ya se te pasaro

Lib

y esas cosas, pero estarás aquí a las tres en pu

que Marcus tenía una fiesta de cumpleaños?

bas tan cansada de escuchar hablar

mirando a Sofía mientras

illa- No quiero ir, me sentiré incomoda, pero Marcus y mamá han i

ro ir, pero mamá

s, debí sospechar que no sabías nada en cuanto pregunto eso, pero entonces se apresuró a pregunt

emparejarme con Marcus, yo ni siquiera lo s

Marcus es grosero y pedante en algunas ocasiones, pero en el corazón no se manda y

lo que es peor, llevar alguien a la casa para q

abe duda, pero no quiero hacerle frente a eso sola, por favor, acompáñenme, no me de

dejar sola, ¿Ve

nta tan sonriente que por un momento

s, los zapatos, el peinado y todo lo demás y tanto es así, que, a las dos de la tarde, ya tenemos todo coordinado y quedamos en que Sofía ira

se preocupen por mí en este momento en que yo estoy más preocupada por lo que mi mamá pueda hacerme, que es mucho teniendo en cuenta que contrato, porque ya me lo confirmo, a su asesor de imagen, Golner, quie

decirlo, del cumplimentado, mamá salta feliz y dichosa de poder tener a alguien que no se va a negar a nada de lo que su asesor diga que ti

s. Me carcajeo junto a Sofía mientras Golner, histérico, pide a sus asistentes que desenreden mi largo cabello porque nada del mundo dejare que lo cort

dor. Toca el cabello de Sofía e inclina su rostro hacia la izquierda, luego hacia la derecha, la observa desde todos los ángulos y me mareo por su escrutinio. Minutos después,

y agradece tímidamente al alago de mi

uedo usar –Respo

dos para Anahia pensando que ella querría escoger, ustedes s

der estando de acuerdo, por primera

siera m

o es ninguna moles

Es más, dame los co

e color palo de

hecho que me arreglen de esta manera, no quiero ser la princesita de nada. Mamá me mira de mala manera,

reglarte y vamos a ver qué bien quedas, pero primero, un baño, estoy segura de que con tanto arreglo te sientes sucia y es bueno que refr

r engullida por la perfeccionista de

–Sonrío con burla haci

ía de res

para que arregle también mi cabello –Ellos se ríen, pero después papá cae en la cuenta de

a tu madr

si tú también

callarlo y mira hacia todos los la

inspira Wendy Altermayer.

os lo esperas ¡Zas! –Papá golpea sus manos exageradamente haciéndome reír- Estas domado, atado y en camino a la crucifixión

las mininas las trato como unas dios

rios me dan arcadas. Los tres intentamos comenzar una discusión sobre quien do

as escaleras. William y yo nos reímos mientras él nos fulmina con su mirada violeta. Gesticulamos un "domado" que lo hace sonreír en derrota y sigue su camino- Will

á mostrándose sumiso y cuando sube las escaleras

El cabello liso te sienta bien, aunque va muy largo –Observo el mechón que cae un poco más debajo de mis cadera y no digo nada, me gusta mi cabello largo- Te gustara el vestido que compre

ias,

onmovida por sus palabras, la abrazo. A mí también me gustaría darle lo que ella quisiera,

zo y ella me mira y so

n tu cuarto el vestido y el calzado a juego. Cuand

timo y pequeño abrazo y

preparo mentalmente para soportar una noche de fiesta en casa de Marcus. Me

lado de unos cuantos mechones que hace que mi cara se vea despejada y se aprecie con claridad mis ojos violetas enmarcados con delineador negro y mascara para pestañas que solo hace que estás se vean más largas, mis

o la parte superior de mis hombros y se abraza a parte de mis brazos por dos mangas de apenas centímetros, eso al frente, en la espalda, ¡Es una pasada! Toda la es

que quería mi mamá que todos vieran, una muñeca. Resoplo un poco y me dirijo hasta su cuarto,

hermoso, en straples recto, ajustado a la cintura y suelto de ahí en adelante, con una capa transpar

la está bellísima y yo no me reconozco,

ué? No me mires así, ¿Las has visto? Mamá, no voy a hacer de niñera toda la noche y ellas dos, así como están

a hasta que te vea que te

ro,

guapo, pero no te lo mereces, es más, ojalá y esta n

nde, sin duda alucinado como

efieres que

ente joven, gente llena de vida y –Mamá gol

abajo mientras tratamos de contener la risa. Mamá resopla cuando William sale de la casa y vuelve a mirarnos- Disfruten de la fiesta, mis niñas. Y

, m

señ

o a mi mamá cuando se porta así y no me obliga a hacer cosas que no quiero, esa es la ma

liam está esperándonos en s

itas, direct

os de William brillan de manera extraña, arroj

o fulmino con la mirada y paso por su

ckeline, ella ya está en la pue

n la parte superior y negro en la inferior, con transparencias en el área del abdomen y abierto a medio muslo en la pierna izquierda se despide de una sonriente Esmeralda- Dios, por

tról

puedo, no cuan

I

vencida, me guardo la opinión cuando Jackeline entra en el auto y nos dir