Secretos de Estado El Misterio de Tovar
añana para recibir una aeronave completamente diferente, la orden era completamente extraña, sin embargo los oficiales encargados del mantenimiento de
sala de conferencias de alta velocidad. Se encontraba estacionado al fondo del hangar, en su interior un ocupante misterioso de cabello liso y blanco meticulosamente peinado y ataviado en un l
demasiado sencilla, sus servicios generalmente eran solicitados como último recurso, cuando la diplomacia se convertía en una opción inviable, pero esta vez solo e
e un único vehículo que se detuvo justo a un lado de la puerta de la aeronave, un sujeto ataviado en un elegante traje militar bajo del a
ugar M92F plateada con empuñadura de marfil y el emblema de la Hermandad tallado a un costado. Deslizó s
repetía mentalmente.