La obsesión de Marchetti
Mar
or todos lados. Estoy seguro de que se molestara conmigo por dejarlo t
ejo cuando el olor de este al acer
ustrado? -
o, -refunfuña d
edió? -pre
a que soy un mal bes
que quieres
diga eso?! -Gruñe-Le mostré
te con un
roga-No haría eso con human
s y se da un trago de una copa de champán. -No es malo que desees ten
ébiles,
impide que puedas tener
iesgarme de es
en buscar a aquella humana, no la he visto desde h
sar al apartame
Sí
n se va a su habitación, no me sorprende encontrar a Kristin
ola siempre, -con su velocidad v
ndo lo desees y que te daré todo el dinero que quieras, -la vampiresa se dedica a
mo, Enzo,
el mismo tema, -e
s por mi cuerpo y el frío de su piel no causa ningún efecto en mí. Desde hace
ero estar
spi
no provoca nada en mi cuerpo, me separo de esta e ingreso a la ducha, Kristin no se rinde
a decirle como último recurso
o, mi amo
a Astrid a la que tengo en vuelta en mis brazos hasta que caigo en un profundo sueño en
.
e pido a mi hermano que ya está
ero que algún día resuelvas los problemas con
tiempo aquí, sin embargo, lo de la humana
ta lu
rcancía que ha llegado, ser el nuevo Don es difícil y más cuando el antiguo era el mejor. No tengo a mi pad
la oficina-La joven fue secuestrada, -a
sucedió eso?! -
or parte del escolt
más tarde, ¿Quién l
fia de
a una reunión y averigua el precio, no me la dará
erá mía desp
Le
ía que en pleno siglo los secuestros se logren con éxito. Lo digo porque hoy las calles se encuentran a
an a mí alrededor, mis ojos se encuentran cubiertos por u
r a la embajada, -les digo, sé un poco de cómo funcionan la
er está a mi lado y por su
e ellos?
o también estoy se
es son?
cuche, ellos venden mujeres a p
iero ser prostituida y tampoco ser alejada de mi familia, no
i demuestres d
e sabiendo que seré vendida? -p
si lloras serás débil y te sac
sabes tanto
uitan la venda y frente a mí tengo
o, nadie me vendrá a ayudar, -la ropa que utiliza no deja na
iero esto,
rle. -En una hora llegara un doctor, él te evaluara completa, buscara cicatrices que puedan deval
¿I
el ceño fruncido-¿Eres virgen? -cuestiona, mir
¿Q
asta, -dice. -Son vendidas
r vendida, -la
deseado pasar por una subasta, -me sonríe. -Las mujeres que son compradas de es
es bien con tu comprador, ya que si le das muchas molestias,
reer que eso es
r se marcha dejándome sola en aquella habitación. Me niego a vivir de est