AMOR A LOS TREINTAYSIEMPRE
na
de nuestra relación y poco a poco me fui alejando de él, y no porque no me gustará, es que mi pensamiento estaba
rnos, bueno... digamos que nuestros encuentros ya no eran tan seguidos, pero si había algo seguro y es que cuando Jhin despertaba des
do y a mi preferencia estaba más que perfecto, pedimos comida de mar y estaba deliciosa, seguido a eso nos tomamos una botella de vino, y conversamos de nuestro proyecto, de lo fácil que nos habíamos entendido para el mismo, abrí mi corazón gracias a
de la línea, y como si el destino quisiera que lo escuchará, le decía - amor estoy aquí en tu casa, e
ado esa noche se había esfumado en un minuto, y literal un minuto eso duro la llamada entre ellos dos. Cogí mi chaqueta y
dad de nuevo, miré mi reloj eran más de medianoche, pero para Jonás nu
habíamos creado un círculo de confianza el cual podría servir e
tal acostándose con mi
mara y bajara la voz, el tampoco entendía que estaba pasando, y la situación estaba fuera de control, y como si yo fuera lo úni
da expresión le había dejado, moría por besarlo, por meterle mi lengua en su boca, por hacerle sentir
uería consuelo, el solo quería un abrazo, un ab
pero que se le pasa por la cabeza a este tipo de gente, porque se creen con derechos de jugar con el corazón de alguien y su confianza. Frente a ellos no tuvieron más opción que guardar silencio, Jhin delante mío finalizó su rel
o otra persona, que lo perdonará, le rompió igual el corazón el muy sinvergüenza a mi hija, pero creo que fue lo mejor que le pudo pasar, ese par no merecían a una n
o estaba soltero ahora, Jhin estaba sin compromisos totalmente abierto
s años juntos y su corazón parecía que se había quebrado en dos, esto me confundía porque llegué a pensar que el
s a un bar, bailamos y compartimos, en realidad no sé qué estaba empezando ahí, yo era feliz, el también aparentaba serlo, p
, ya ni lo sabía, el todo es que el tiempo a su lado era el mejor, lo disfrutaba
, y acercaba mi cuerpo a el en un va y ven de sensaciones, un día me volteo mientras sonaba una canción moderna que decía algo así como "no me importa que usted
bsesión, una obsesión se**** , el fijo sus ojos a los míos, y acerco su boca a la mía, sin mediar palabra me dio un beso, pero que carajos, Jhin no sabía besar
ía escucharlo como su respiración se agitaba y abría más su boca para mí, por un momento se detuvo a mirarme y pensé entre mi "QUE HICE" , pero el solo quería res
amos a qué se refería , avergonzados bajamos de allí y tomamos nuestros asientos, durante unos minutos ninguno fue capaz de decir ni una sola palabra, fue un s
sabor especial, su lengua era suave y me besaba como si no hubiera nadie más a nuestro alrededor de repente di un gemido fuerte, que había confirmado que solo con sus besos y su dulce mano tocando mi entre
ue si estaba bien a lo que yo res
sensación que había tenido, sabía que él no era para mí, era tan solo un jovencito de la alta sociedad, inexperto, y mucho menor que yo, esa noche me llamo Jhin muchas veces y no quise contestar, estaba confundida
e lo que la recordaba sonaba en mi cuarto, y ahí estaba mi amado Eithan, su padre había llevado mi hijo de visita y yo lo había olvidado por completo, abrace mi pequeño, tome una ducha y decidimos hacer un plan,
que me había olvidado el resto del mundo, así que decidí tener una cita con e
mi chico, desde principio a fin, le conté lo mucho que me
, si las cosas se dan no te sientas culpable, solo disfruta el momento y trata de no mezclar el corazón p
é, me preguntó que había hecho mal para que me alejara de el de esa manera, yo simplemente le dije que teníamos que
tó si podría pasar y le dije que sí, le pregunté qué pasaba y me había dicho que su familia lo estaba presionando a casarse para
cho más apasionado que en el bar, está vez pude sentir todo lo que su entrepierna me ofrecía, y sí que estaba duro, me daba deseos inmensos de que estuviera dentro de mí, el empezó a tocar mi cuerpo , parte por parte, pero es que sol
que estaba pasando, mi cabeza al igual que mi fl
, cuando decidí arrodillarme a sus pies para poder observar que tenía guardado para mí, sonó el timbre de nuevo, joder grite, pero quién se había at
, me hacía feliz la decisión, pero porque llegaron preciso en ese momento. Jhin solamente dijo hasta mañana señora