Reconociendo a la hija del CEO
Llevaba más de una semana sin ir a
tra llamada de
la llama
se
mi asistente. Ella se retira para hacer su trabajo y dejarme hacer el
la señor
Ãa luego. Estoy muy
S
o y me puse de pie para acostarme en el sofá un rato para calmar el dolor. Lo primero que veo cuando abrà los ojo
biaste el color
e dÃas y lo primero que me
mi cuerpo hacia adelante, re
n estado preg
ana cuando term
o que
se aleja y es
r qué está
n mi mente antes de que se fuera. Zoe se
o dejaba de decir que llamarÃas en cuanto te desocupa
uál
ienso sobre qué habÃa prometido ahora último, pero no consigo recordar. No estaba de hum
oficina, me cambio de traje y continúo el
ol
ces aquÃ
mo me p
bajando, ¿n
. Tomo mis cosas para irme a casa, pero oÃr las si
ste sola a tu espo
é di
es para pasar el dÃa en familia. Estuvimos hasta tarde y no llegaste. ¿Qué fue lo te impidió para que no asistieras?
esa. En su cumpleaños anterior, habÃa prometido que las llevarÃa
que se te v
discu
s. ¿Qu
idea. Debo
ara que cumplas con tus promesas. He n
a recriminar mis errores
otra vez he fallado, sino por el hecho de
e
na s
lla
Trato de pensar en una excusa para evitar tener más discusiones con Zoe frente a las niñas. Bajo del auto y entro en la casa. Todo estaba en silencio. N
ponde ninguna de las llamadas, a
, iré. Zoe... lo siento, fui un imbécil. Siempre lo soy, perdóname... compré los vuelos para Paris, salen en cinco
o, pero no responde. Sigo intentando y no consigo que me responda
ev
ita. Espero que
s algo
¿Po
es
é te r
sponde a mis ll
para
preocupado. Mis hijas y mi esposa estaban desaparecida
. Le abro y le doy espacio para que pueda pasar. Reg
ea de a dón
N
la última vez
mañana. Digamos que tuvim
esté con a
engo
te a la
N
que Zoe no ha ido a la fundación d
. No han
ono. Quizás a ti no te quiera resp
lpearlo en la cara por recordarme lo imbécil que f
é a la
spe
Kevin grita para que me detenga y me en
as niñas y yo estamos a salvo. Volv
star realmente muy enojada contigo para hab
lo
bemos que ellas están bien, a
aci
o. Te estaré informando s
olo otra vez, decido
gresa a casa y hablemos,