Placer intenso placer ll

fuera por su apoyo y comod

todos los cambios que

n tan poc

sábamos casarnos

ba al fnal de mi qui

e preocupaba. Lo con

ue todo estaba pasand

diera hacer para detener la

como si nunca hubier

voc

por eso, Helena.

ia y pre

i tú te pones nervioso,

o, probablemente tendré

lo tuvo que dormir

e usar un vestido que

esesperar. Eduardo se

no lo creí y lo ec

cambios que vi a

ir culpable por preocup

en la vida que estaba

preguntó el doctor y

a el corazón de nuestro

empo y pensé que lo mejor

mi emb

um h

y yo respondimo

tención, verás que

rdo, para ver si esta

smo q

emelos?" Edward pr

do del a

cta, sí". Tengo dos co

nes a ambos. "Aún en sile

era posible distinguir el

ocionó y exasperó

no solo a uno, s

a, después de vestirme

do ha

taré algunas vita

deberían pasar en las pr

lvas a mi ofcina. En

muchas mujeres embarazadas lo s

tipo de anormalid

n hasta que encontremos

o en las noticias. - U

ación con su peso. Te que

iado rápido, pero de acu

lo que estaba hace seis

ate de comer bien. - E

e momento y me di cue

mis hábitos

moso, señor Eduard

a en Hudhman & As

mpañara a su ofcina a

jar desde casa e

o dejaré que la m

erda", replicó, diverti

é de mi

a Hudhman, lo l

a ofcina de David para

antes de i

o a solas, para admi

ación de cuero era un

traord

s donde trabajaba

Ent

o que querías

problemas con uno de lo

blé con tu padre y m

amos llegado a un acuerd

í, pero esto de aquí está po

igo tan pronto como re

rsonalmente con su padre e

bajar el valor porque

izo perder tod

idad de caridad, Ed

s no debería hab

rmó la propuesta, no

no entiendo por qué

as estado, de todos modos?

Helena. Ni siquiera c

imo

quería o no saber

a que ver con Eduardo y

tormento

me int

azada de mellizos, pr

aldita sea,

cia, sentí una mezcla

dos. Dos niños que

ría de

licitaciones, Eduardo, e

ención al papeleo frent

a dando todo lo

ti, David. Ahora,

Helena y yo tenemos la int

puño y me puse

to si esa cosa de c

eres más que un hi

sa que nunca sa

e dio la espalda, él a

mpre un perfecto caball

a, esperaba que estuvie

ía si lo viera lastima

o cuando mi madre me

l domingo. Ha pasado un tiem

la idea, aunque sabía qu

ese día debido a u

, mamá, pero Bianca sí,

dre, que había pasado p

nvitó a almor

jo. No sé si puedo so

Tu desprecio por He