EL Turco y el Pintor
adamente hasta que nos quedamos sin aliento. Estábamos en la sala de estar y había un gran mostrador
par a esta muje
iño, disfru
mi polla en su coño. Mientras yo estaba en él, ella estaba acostada en el mostrado
delicia, quie
o, le di un puñetazo una vez más hasta que nos junt
ciendo cabriolas en su trasero y empujé con fuerza dentro de su ano, sin piedad. Ya no podía
ás y más fuerte. Vi a la perra correr
va a matar de l
orrí en ese delicioso agujero. Si no fuera por sostene
tá ca
cansado en
stás casado... Ven a
se durmió. Me di cuenta que ya era muy tarde y mientras el su
e entraban por la ventana. Miro a un lado y Rebeca seguía durmiendo. Miro
aría que este día
a quedarme aquí con es
stoy p
ujer me
eza, alejando es
un poco más, porque no tengo tiempo para pensar.
y no sé por qué se
ie
está p
a mi ciudad me olvidaré de esta noche. Aunque
piernas abiertas. No pude soportarlo, metí mi boca en
unos gemidos
o, no t
clítoris como si estuviera chupando uno de los dulces más sabrosos del mun
e encima de mí, tu Perla Negra y acué
el borde de la cama con las piernas bien separadas, me paré frente a ella y le metí la polla dentro de su coño, golpeándo
e pervierte un culo bonito y este es
ncima de mi polla y empezó a cabalgar bien. No pude soportarl
correrme
a casi dormida después de correrse. Gemí en su boca cuando mi polla pareci
ortura que me e
ba volvi
fruta
ta mujer se está
tando el domin
vida una mujer me había di
a me
o follar con esta mujer, pero no p
beca tuvo el coraje de ir
con es
e hace sentir
chupándomela. Rebeca no es fresca como las mujeres con las qu
ro sabor es de
a para que nuestro
ede ser para
ejor que te quites la boca antes
. No pude contenerme más y me corrí mucho en esa boca. Para matar mi cordura,
osa esa l
n esa escena. Seguramente ella
razón. Nunca he sido romántico en el sexo, pero
uiero pensar en el romanticismo,
nte
e se me va a salir de la boca cada vez que pi
oy j
pecé a ser
ra de mi partida y siento que se me forma
y follar al bo
perder e
r otro baño,
esa frase, no podía haber sal
o es tuy
o a preparar
espuma. Luego puse unas gotas de aceite aromatizante dejando el ambien
zo esta muj
nadie y está jodiendo con m
ar a Rebeca para que se du
sa, tomemos n
año, inmediatamen
, ¡qué
espejo y miró fij
qué le pasó
ra hermoso n
buen calor del agua y del aroma de las rosas. Tomé una esponja y Rebec
as y Rebeca hizo
bro duro en su ano y la perra comenzó a moverse. Pasé mi mano sobre ella y puse mis dedos en su entrada mientras e
te quieres aca
ca aún más. Siempre fingí no escuchar, porque hacía que mi corazón
estoy a punto de irme. Ella me va a odiar, pero no puedo decirl
puerto Santos Dumont. Recuerdo que mis padres inventaron que necesito una novia y que no neces
ro si le digo algo así a mi madre, podría morirse de pena.
e acariciaba el coño, ella se corrió rápidamente. Algo que no ta
na toalla y la levanté. Puse a Rebeca en la cama y se
earl tuviera el corazón roto, le di un último beso largo y le besé el coño, si
a la cabeza
deliciosa,
go fuerzas
hermosa, ahora
uando descanse lo suficient
o que me he enamorado de esta mujer desde la primera vez que la vi, pero eso no será u
quiero
ré con ella, nunca más. No sé cómo e
oído, mientr
seviy
a alguien, aunque ese alguien es
orazón en
mi Per