Teach me to forget
ry
parar, simplemente he huido sin rumbo alguno, simplemente he intentado
o refugiada en una banca en la parada de autobuses sin siquier
o me traje absolutamente nada, solo salà de mi casa si
eno, pero de pronto, un objeto plastificado y de color negro obstruye mi visión. Lo observo
o le rechazo, sin siquiera mirarle, pero el
ozando una grácil sonr
mo, en completo silencio, tan solo se escucha la
regunta de pronto, sacán
a inventar, aunque claramente, ni si
ste clima?- Inquiere, r
spero aquà a que pase un poco- Me las ingenio para
tono que antes-. El clima y las nubes est
n intento desesperado por
lando el paraguas en mis manos; le mir
Le pregunto, refiriéndo
Voltea hacia atrás y señala un punto hacia la dere
lejo de su parte-. ¿Por qué lo aparcaste cerca
porque vi a alguien correr bajo la lluvia y refugiarse en es
iste que esa
lo s
on un marcado t
trevo a decir que algo nervioso también, luego
igeramente sus cejas y hundiendo sus labio
o qui
quier
a como un claro "sÃ", sentándose a mi lado en la banca, soltando un sus
tuvo siguiendo desde que salà de mi casa o fue
a me estaba acostumbrando. Asiento en respuesta sin más-. Sabes que a esta
qué?- Reto
ntimiento-. Bien- Contesta, antes de soltar un últ
ojos de encima, y me atrevo a mirarle de nuevo, retándole, cuando ve
, mirándole, después
a esta hora, pero igual sirve- Me sugiere, pero yo me niego rápidamente, dirigiendo mi atención a la lluvia que cae violentament
de forma cortante, sin áni
Pregunta, aunque clarame
por qué no se ha ido, aún no sé por qué sigue aquà soportando mi
que preguntaba cualquier cosa y yo respondÃa con palabras cortas y precisas)
aqu� ¿Qué acaso no se da c
ho?- Su pregunta repentina me saca
ue llegaste- Contesto, despreocupadamente, movien
à sola es
pidió tu
ofrec
no te esté
los ojos hacia el cielo, antes de dec
o
ent
tonce
a en mi rostro. Finalmente, suelta una pesada exhalación y murmura un-: Ya nada-
Contesto, de la mis
dice, con voz apacible, pero notándos
sos mañana, asà qu
ar- Menciona, lo que provoca
ete- Le dig
aquà sola, ya te di
ito de tu
yo me of
puedes irte c
os-. CuÃdate- Sentencia, antes de encaminarse a su auto estacionado en la
s la calle. Pasan unos segundos y no se va, se mantiene en s
también, tan solo le costó un minuto salir de éste y regresar a la banca en la que es
no va a pasar nadie- Me
firme. Noto como su expresión serena y sus ojos cálidos me avizoran fijame
s ante su respuesta y el emboza una sonrisa de
ron a sucumbir y el silencio se reintegró al ambiente que nos rodea; únicamente soy
comenzando a apoderarse de mi cuerpo, lo cual se refleja en mis ojos adormilados y en mi cabeza que no puede mantenerse firme. N
d quiero
r con la cabeza en respuesta-. ¿Y por qué cierras los ojos?- Me encojo de hombros y me recargo en el respaldo, sin saber
casi por inercia, notan