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Dulce venganza.

Capítulo 10 Destinada

Palabras:2480    |    Actualizado en: 04/11/2022

cansado, tenía que suponer que algo como esto pasaría y era por eso que la decisión que había tomado era la más sens

ria y gruesa que hizo pensar a Victoria, que su plan había funcionado. Aún que e

odo era su culpa el mismo no pudo controlarse, no podía creer como había podido perder el control de esa manera, Jamas en su vida le había ocurrido algo igual, nunca habia perdido el control, era la primera vez que u

Colins? -F

a la habitación de Victoria con una simple advertencia. Black fue claro al respecto, no toleraria ese tipo de comportamientos, pero también le d

osesión, específicamente desde el interior de su lobo pero lo ignoro entrado sin tocar a la habitación. Victoria miro expectante a su guardaespaldas, no lo creia

mientras se quedó a medias sin decir nada, ca

era si no por que debía, aún él aroma mezclado de excitación se encontraba en el aire y no sabía lo que Victoria sentía o pensaba, pero si sabía lo que el sería capaz de hacer

ndo se interpuso entre el y la puerta, Leo ni siqu

dió? -Colins negó agua

alfa, pero no era así, apenas se quedó a solas tuvo que tomar supresores, los mismo que usaba en su celo para que pasara más rápido y se sintió tan mal al respe

quiero se pregunto por qué, simplemente se hizo aún lado ent

o sabia que con el estímulo adecuado podía despertar su lívido a niveles exuberantes. Maldijo, sin saber la razón de por qué se sentía así, ¿por que su lobo añoraba sentir a su guardaespaldas? y no podía negar que ella también lo hacía, pero era una locura, ella lo de

urrido, siempre lo era. Cuando salió de su habitación se sintió sola, estaba mal acostumbrarse a salir y encontrar a Leo fuera de su puerta como perro guardián, no había pasado ni un mes pero ya se estaba acostumbrando a él y realmente

tanto ella como Leo parecían indiferente. Tenían que lidiar con lo que había sucedido y si el alfa quería seguir

sino de sus padre. Lo que sintió en ese momento había sido incluso más fuerte que la sed de venganza, ese sentimiento que acumulo por años era nada a comparación de la necesidad qu

ia un lugar apartado, donde nadie pudiera escuc

ando su celular empezó a sonar, limpio con su boca sus dedos llenos de que

és de casi una semana s

ito tu ayuda. -La aludida entorno los ojo

un plan y al parecer la único que le interesa es a mi, ni siquiera Felix

sus salidas, aúnque conociéndolo podría tratarse de cualquier cosa-. Como sea, hablaré con él después, quiero que investigues alg

esitarás mi ayuda para entrar a los datos del gobierno ¿verda

sa información, si no

que me adentre al banco de sangre virtual para analizar la co

pagar un análisis de esa índole, era más solo un método experimental que no te garantizaba nada ya que solo el 0.9% eran capases de encontrar a su pareja destinada, el olor de un lobo era tan variable como un perfume y muchas veces confundidos por ello buscaban a ciegas a una persona que tuviera un olor específico, cuando otra más podría poseer un olor similar y ser tu destinado, estaba confuso, era por eso que aquellos que llegab

no tuvo respuesta alguna-. ¿Me estas jodiendo? Se supone que tenías un objetivo y

era que una vez que encontráras a tu otra mitad sus lobos se reconocerían y

si no fuera realmente importante, entonces puedes hacerlo...-musito de m

amó-. Lo haré, dame

btener los resultados

una ceja del otro lado del parlante y Leo

tu men

ictoria...? -Eso

solo fuera una maldita atracción pasajera, le pedía a l

, tanto ella como su padre estaban de pie, Filip trataba de tranquiliz

burlesca, junto a el se encontraba el ministro de estado, lo conocía muy bien ya que había investigado a todos los socios o conocidos de Filip, otra basura c

erla, el no sabía nada de esto, siempre pensó que Victoria estaba enamorada de Alan cuando en realidad todo era una falsedad ella nunca lo amo y nunca l

tu fueras el nuevo presidente, pensé que cuando eso llegara a pasara yo... -Se mordió el labio sintiendose tan idiota-. Podría romper este

mo que el Victoria. -La omega lo miró y negó frunciendo el ceño y al mismo tiempo

el sabía que no lo quería. Sie

rostro de Victoria se desformo en una mueca de horror y Black fulm

on el tono de voz más fuerte y Leo no entendió que era

es que eso no es verdad, yo nunca me entregué. -El alfa se encog

e puedes cree, eso no

ue no desearía recordar, aunque sabia cual era tu objetivo no podia creer hasta donde pidria llegar tu fan po

mor, eso no iba con el. Al contrario de eso se sentía confundido, en su cabeza se estaba enmarañando un sin fin de sensaciones y contrariadades que solo el

e compat

supiera lo observó atenta. No había duda, Victo

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