Una esposa para el, CEO
que no; pero, en el último minuto no sé
s feliz del mundo, aunque creo que lo prim
ndo a medida que estemos casados
presencia. No te preocupes. No es necesario que debes estemos durmiendo juntos co
mente tentadora. No podía d
ese momen
rnos. Estaba nerviosa, en esa tarde, no había esperad
mis nervios hicie
menzaron a sangrar. No sabía muy bien en e
nta de que a pesar de tod
en su cuna mientras que yo
era algo bast
ube pintada de un
a incluso hacia su aparició
ida con la misma ropa. No quería tampo
azos, y después tomé el
desmayar en cualquier momento. Habíam
lgo había bastante público
n solo tres cuad
atractivo el cual había reconocido por tod
nte avergonzada por los pensamientos imp
mbre tan
oder creer que un hombre a
nerviosismo hasta que fin
que una ceja entonces que serán pobladas, su nariz perf
entreabiertos, in
mplemente, y s
taba estirada en contra
ese instante fue bás
ión y en cuanto los abrí, pude darme
o hacía en buena manera. Pero d
estaba tan nerviosa que en cua
vés de esta página, había conocido a alguien en p
emente yo lo miré
mi..? -quiso saber y yo levant
, el primero me prestó atención a mi
cito. No pude evitar morderme los labios nervi
. Aunque si no quieres asumir el papel... No te preocupes nos pode
otras mujeres..
o -dijo divertido
eco más hermoso que había
brlasada, o
sentirme de esa manera por al
as conversaciones
te bajando la mirada, y mirand
sostuvo mi mano con bas
arte, voy a
a cuenta de que esto es u
... tenemos que hacer una bo
en ese momento lo hice más que nada porque
y también me sentía culpable, de sentirm
como yo solo
mo pasar a nuestro lado, sin
en este instante soy yo. Levantó la vista, s
ervando cada detall
de miradas, que ninguno de los
aco de nuestra
de ese hombre he
brazos, y la misma
a Francisco, su pequeño grito, freno de golpe. Empezó a mirar lo, creo
o tímida ya que básicament
fiar a mi bebé a una persona desconocida. Pero creo que en este moment
era decir si esto estaba bien o no y par
iña -dijo
an gua
ezó aplaudir
emente, sin desviar la