Una Sumisa Para El CEO

ía. Caminó hasta el vidrio esparcido y respiró más profundo cuando notó la sonrisa grandiosa en su rostro hermoso. Ella conversaba con un hombre mayor, sin embargo, alto y estaba

ejor que est

rió la puerta para él, tenía que salir de allí antes de

reposicionando en el asiento delantero. Levi se que

eglando su ropa cara. - No tengo más tiempo para

siguió adelante, direct

del establecimiento, su felicidad estaba contagiando a todos. - Sólo Dios sabe cuá

dijo que sí. - Yo no pagaría tan

reocupes, es

mañana? - Confirmó que estaba emocionada,

cho, la alegría era inmensa. Corrió hacia la para

o. Tomó el autobús directo al hospital, se sentó en un banco cerca de la ventana y respiró profundamente, queriendo mantener la calma. Cuando llegó al hospital cruzó el pasillo dis

cardíaco cas

eras miraron hacia atrás, pe

tó, pero no lo hagas hablar, o hacer esfuerzo, su cuerpo

los ojos abiertos, hace mucho tiempo que eso no suced

a hablar ya. - salió de la vista de Mel, ella dio

imara más. Se mordió el labio y le puso la man

te, las lágrimas comenzaron a aparecer y Mauricio también lloraba. - Sé que quieres salir a jugar conmigo en el

sobre todo, pero en un momento de esos, ¿no puedes estar bien? Mañana, podrás hablar tod

su hijo más joven se sentó frente

cer - el mayor se apoyó en

que tenía que hacerse, lo hiciste en un mes y medio, ¿de

- Miró a

- Levi sólo te miraba, sin ánimo, o motivación

Estoy

edó sentado - conozco al hijo que tengo, está dif

levantaste también - Soy adul

ue no me importa lo que usted haga, apenas con el trabajo que

Gra

fue la criada? -

la incom

ella está estresada persiguiendo a otra emple

e deseaba, sino una mujer sexy para servirle

na, quiero que vengas aquí un día sí y otro no, para ayudarme si lo nec

m... -

desfilar hacia ellos - Mirella está en la línea dos, y espera desesperadamente que atienda

polla tembló, pero no lo suficiente para comerla del

e, le parece

la mesa, odiaba tener el mismo hechizo que su padre tenía. Le gustaba coger con muj

e canto - es de Teo -

o trabajar escuchando gemidos - dejó la oficina de su padre para

a puerta a Leví,

iste algo

n bonitas, muy bonitas, rubias, ojos claros, cuerpo hermoso

cerró la boca, furiosa - y ni una tiene un maldito cuerpo he

Ella es una chica tímida que c

ro. Tú acertaste cuando la trajiste, aciert

mujercita, su paciencia estaba acabando, él necesitaba comerse a una mujer desesperadamente, si Mi

o largo, además de nada, nada salió realmente bien. Pero Mi

tarde en la noche. La criada se acercó dejando una taza de café, Levi levantó la mirada hacia ella después de minutos, y mi

cirlo, falló miserablemente, ni con el suéter transparente y con el escote gi

ño y continuó parada, Levi se extrañó en el moment

su cama desde hace mucho tiempo, y solo por eso, ¿las empleadas de esa maldita mansión ya estaban pensando que pod

mbrado a dormir siempre tarde, después de coger "su" mujer por horas, en

era un hijo casi bastardo de la familia, solo por haber sido expulsado de la vida de su madre antes, simplemente porque traicionó a su marido sin piedad alguna y se fue y nunca más volvió. Victor

ara salir de allí, prefería una nueva casa donde pudieran crear recuerdos felices. Y así lo hiz

odo el mundo l

uería, pero estaba bueno en el momento. Fue al baño, cuanto más pensaba en el calor que su cuerpo tenía que tener, más pensaba en la perra que había huido de su casa, y sería ella la mujer que él arrastraría a su cama. Y sabes qué, él