Vengo por tu alma
la mirada que le echaba Ankwar a la espera de lo que diría a continuación para referirse a su madre. Por lo que se rem
, así que no tienes nada de qué preocuparte-dij
chica tan gallina
ca ante el mote estúpido que le puso su nueva conquista, pero
sgarse. Ya de por sí estaba flaqueando, imagínense
por el simple hecho de que s
agarre en esto y después me vaya a correr como si fuera una vil
r los ojos. Pero que chica tan aburrida. No obstante, a
adre y como consecuencia, la señora Assuan Shamkaro era conocida en la com
relaciones igualitarias. Algo que Ankwar no compartía, porque... de hecho, ella era de mente abierta y le enc
imiento público como le gustaba desafiar constantemente a sus progen
jos de todo aquello y olvidar de donde venía, forjar s
udía con padr
o era por obligación, ya que su madre era judía, y su pa
ró de un extranjero y huyeron en cuanto se les presentó la oportunidad, logrando así, vivir una vida
de comportarse con ella y con su madre. Por ello, ideó un plan tan perverso que hasta e
tras te corres en mi boca-lo ojos de la chica brillaron con expect
e había ubicado estratégicamente frente a l
yos, luchó por no apartarse de la chica con una mueca de asco; aún se excitaba, prueba de ello era la creciente humedad que fluía entre
le y dirigió su mano al pecho izquierdo de la joven, apretándolo suavemente y
sus piernas hasta llegar a sus nalgas y acariciarlas superficialmente, para acto seguid
irar profundamente para no correrse. Tenía que calmarse, la excitación por lo q
u mano en el acto y sonrió con picardía cuando
Ankwar y con sus dedos pellizcó suavemente el pezón, causando que un ardor placentero
la chica para que volviera a repetir el
aricias frenéticas de su chica indicaban que estaba a punto de h
En ese momento no hacía falta las palabras, cada cual sabía lo que quería y se encargaba de hacérselo saber a la
s de prometer significaba que se tenía que tardar solo veinte minutos más pa
as la chica se ponía cómoda y queda
ó hasta tenerla totalmente abierta para ella. Olfateó el ai
abios, pero definitivamente, está
ez. De inmediato la chica comenzó a sentir un placer tan intenso que no pudo evitar alzar s
ris de la chica, haciendo que este se hinchara a medida que la excitación aumentaba. Ankie comenzó ae un segundo se maravilló al ver la espesa miel brotando de su abertura, mojando el sofá y
ba tanta presión en su interior y para colmo su Ankie no la dejaba culminar, pues cuando sentía que estaba
la le gustaba. Primero se los apretó suavemente y luego, con el pulgar
ortancia, a lo mejor eran los vecinos de Ankie paseando. Era m
ó a lo lejos esas voces sonrió con perversidad y apres
de placer y lo mantuvo entre sus dientes mientras que lo torturaba masiva
de placer y se remo
ev
uchacha y dirigió su atención a su abertur
c
n más cerca y Ank se e
et
ua y de vez en cuando la introducía en su interior, siempre pr
e
s cerca y Ank se preparó mentalment
nc
e inició su tortura reiteradamente, al mismo tiempo que acribillaba el sexo de la c
at
eíble que la chica se encontrara tan ensimismada en sus atenciones
r
ismo al son de los movimientos de l
o
velocidad, amando cada momento en que el sexo chorreante de la ch
n
izo pedazos en la boca de Ankwar. Haciendo que el sofá blanco, la cara de Ankie y el pi
e la recorrió de la cabeza a los pies y así lo expresó con sus fu
e
se abrió justo a tiempo para que las personas que se encontraban tras ella fueran participes de como la chica se desas
r, dio un par de lametazos más en el clítoris de la chica y
e había sido egoísta en ese aspecto per
aldrían por unas horas y volverían con algunos amigos d
so manos a la obra y movió el sofá hasta situarlo frente a l
al asco y odio. Esta última por parte de una chica que no tenía el valor de admitir que
ado, aún no entendía como
se fijó que no sabían dónde meterse y que
s le encantaba, pen
U