Un amor XL para el CEO
orando hasta que por fin logró quedarse dormida bien entrada la madrugada, más por el agotam
as podía abrir los ojos, parecía que había recibido un puñetazo en cada ojo, de no ser porque la inflamac
na ducha que la ayudó a relajarse y soltar la tensión que, a pesar de haber dormido, aún
a prenda deportiva y por supuesto, el vestido y el blazer que Charlie le había comprado el día anterior, bien puesto en una percha, maldita sea y a
ador, llegó a la compañía y subió hasta la oficina de recursos humanos, solo p
el préstamo universitario que todavía arrastraba, pasarse el día buscando en las redes sociales cualquier contenido inapropiado que debiera ser borrado lo antes posible, eso fue lo que le dio la idea para su aplicación, algo innovador que si al fin la
no se explicaba porque el hijo del mayor accionista de la empresa estaba
n instante observándolo, era un hombre guapísimo, posiblemente esa fuera la razón de que cada vez que iba a la oficina causar
e cotilleo en las distintas redes sociales, hacía lo que quería, cuando quería y con quién
su cabello completamente negro, a ella casi se le para el corazón por un instante, tal vez incluso se había olvidado de l
a chica y levantó la vista para observarla - Taylor, señorita Lía Taylor...- repitió más bien para sí
a cubrir la vacante que dejó Harris al jubilarse, cuando él la observó de forma inquisitiva, no deseaba escucharla, deseaba seguir hablando él y es que Ev
tros como becaria, si, ese es un puesto que solo tiene la duración de un año, la mayoría son echados en cuanto se termina ese contrato - su vista se desviaba a los documentos que tenía de vez en cuando, como si estuviera revisando datos sobre ella o tuviera una guía de lo que debía decir - tenemos las calificaciones con las que terminó la car
tenido que convencerlo o algo parecido, ni soltar el maravilloso discurso que l
extraña sensación de haber superado la prueba con dema
teresante, por supuesto en ese caso sería usted quién se encargaría de llevar ese departamento y no solo se quedaría el pequeño despacho en el cubículo de Harris, si no uno para usted sola, aunque eso es algo independiente a mí, depende al
ía sin entender muy