Un amor XL para el CEO
la última discusión que les escuchó tener en la limusina y ahora nuevamente lo mandaba a buscar a una nueva conquist
salieron del estudio. No tardaremos en llegar al
le, algo que él ya sabía y no solo él, también la mujer que en ese momento lo observ
sus manos hasta sus propios senos, acariciándolos por encima de la ba
la cena con la señorita Lía y prestar los gemelos en cada una
urbable, no mostraba atracción y tampoco desagrado. No dijo nada, solo se acercó hasta ella y la tom
ablas de lo sucedido tendrás un equipo de abogados sobre ti - sus palabras eran suaves, pero al mismo tiempo tenía un tono frío y auto
todas las anteriores a ella, siempre dejaban de tener encantó una vez conseguía de el
erta de la suite del hotel más ca
ar a su cita y aquello le molestaba, para él era muy importante su palabra y la puntualidad, sobre todo
el mejor restaurante de la ciudad y era ahí dónde se dirigiría, ap
ucido por el mismo maitre hasta su mesa, dónde se l
solo fuera inteligente para crear app, también para tomar las oportunidades que se
ción de que si tocaba algo podían regañarla como si fuera un lindo objeto de exposición. Además, estaba demasiado nerviosa como para tener hambre, ni siquiera la a
- le advirtió el chófer - También hay una pequeña never
cabo quedé con el señor Anderso
tante en el que el chófer le abrió la puerta, sus nervios se incrementaron, respir
rva?- preguntó el m
a el señor
a ganado durante el día mientras la estuvieron arreglando y haciéndole la sesión de fotos, se esfumó
llegar a la mesa donde un muy apuesto Evan Anderson esperaba con su cara perfecta, ojos pe
cer en compañía del maitre, evitando que este dijera algo,
mismo la silla donde se sentaría, volvió a s
a tu respuesta, quiero saber un poco más de ti Lia Taylor, aparte de su
ella diría que sí. ¿Qué mujer rechazarí
calor de esos labios que hicieron que su propio calor
, era imposible hablarle con
tan personal - verá... yo le agradezco el día que pasé en esa agencia y todo lo que hicieron por mí, me
de agua y se la llevó a la boca para beber, tuvo que desvia
como el que me propone ¿Cómo podrí
r que me fijé en ti?- le preguntó sin comp
la habían
e fijaría.- explicó sintiéndose algo incómoda por su pregunta
anera que tiene la gente para evitar estar solos tras un día de trabajo. ¿No sé qué ve de malo en mi propuesta? Aunque no
s de un menú degustación que Evan había pedido ant
recibir un gesto de aceptación por s
verá a mí no me gusta llamar la atención, quiero una vida tranquila
e les habían traído y llevándose un canapé a la boca, aquella m
ujer frente a él, tratando de entender como
de uno de los hombres no solo más ricos, también del más
idelidades, porque supongo que no piensa vivir célibe durante lo
ágenes que le llegaban y es que Lia podía ser muy gráfica cuando se po