Contrato de Matrimonio con un paralítico
a Dy
nca había estado con ningún hombre. Yo no iba a dañarla así como así. Nuestra primera vez debía ser especial e inolvidable, bueno, si era qu
que estaba cerca de la tina de baño, y a
to! -grité tembla
o de dificultad me arrastró y me subió en ella para salir del baño. Luego de eso me ayudó a vestir. Su mirada tierna me t
carte -le dije con desdén, para que n
logró dormirse. Así que cuando lo hizo aproveché para mirarla; era una muje
peles, además de que había matriculado a Helen en una universidad para que pudiera est
el desayuno a la cama, y después de desayunar me fui a
ran amigo mío y no hubo problema en que empezara dos
nes que firmar y muchas reuniones por asistir; pero en cuan
tás tan exasperada Lucy?
a ha comenzado a hablar d
por qué te sorprende eso. -Me acomodé
a, que se ha casado con usted por dinero, que ningun
esto. ¿Acaso no era un hombre
nqué de sus manos para mirar
onio ¡Helen se estaba besando con un jovencito d
erta -musité con lo
on odio y salí hecho u
dos de mi amigo Gonzalo. Necesitaba calmarme o sería capaz
ta había pensado en llevar a su mamá con nosotros, pero ella me pagaba de aque
uerta de la oficina de Gonzalo apen
ir, es noticia tus ca
entrecejo
que quier
ió con
a no iba a poder llevar tus cargas. No sé cómo harás para que no te haga pasar el ridículo en la fie
onde ella tendría que acompañarme. La vida de rico era muy escandalosa, y aunque quería mantener mi vida privada al margen de periodist
un bar, ¿me invitas a tomar unos tragos? -s
vir de nuevo me contenta de cora
depresión después de la muerte de mi esposa y mi hijo, que h
ayudó como siempre a subir al auto, pero
nos ubicamos en unas de las mesas a beber trago tras trago, platicamos y reímos, per
hablando de hace rato y no me contestas -alzó
pensar quién será el chi
o está, lo que tienes que hacer es as
ensativo a
ión! Cada vez que pensaba en esa posibi
os días, era su responsabilidad atenderme y ayudar a vestir a este inútil que tenía como marido, ¡pero que era su marido! ¡Joder! No sé qué pasaba por mi mente per
ayudó a bajar del auto de Gonzalo para luego adentrarme en el interior
e a vestir? -preguntó Margari
por los tragos, y en la cabeza me daba v
edo a responder-. Ella pensó que no debía dorm
estro maldito contrato, para eso había pagado por ella, para que fuera mi esposa, para que durmie
a, mi esposa se hará car
dos de la mañ
ar! -le grité convirtiéndome en aq
o me importaba nada, estaba cegado por los celos. Jamás en mi vida había sentido tanta r
tu esposo! -grité tománd
vas a despertar de esta man
ción? Te dije que tenías q
r es
iero que jamás vuelvas a dormir con las si
ía cómo podía ser dos personas en un mismo cuerpo; una niña tierna y ob
habitación, ella iba detrás de mí a
desnudo, me sentía un depravado pero la deseaba con todo mi ser. Deseaba que ese
gada a mí -le
e cometer una locura de la cu
estar cerca de tu esposo como lo estuviste ayer de ese chico en el
despojo humano para ella, alguien desagradable para compartir una cama, pero con é
ién es él?
No tenía amistades? ¿No tenía familia? ¿No tenía un novio al cu
n rabia por sus palabras. Por fin estaba sobre esos labios que desde
después se dejó llevar por mis cálid
quel momento, pero me dejé llevar y comencé a tocarla, a tocarla d
io aquí! ¿okay? ¡Y espero que no vuelva a suceder de nuevo o jamá
estado al pendiente de enviarle todo el dinero que ella necesitaba pa
casi hasta que amaneció, o
se había quedado grabado en mi
de que tenía cita médica con el neurocirujano que iba a oper
ómo comportarse en las fiestas de gala. Tengo una fiesta importante en unas sema
ompaño a esas reuniones, sab
esposa, Marina, y el deb
a dejado en ridí
ue hagas eso y eso harás!
as, herma
ro esa vez con Marina, que parecía
s irlandeses, en donde más tarde viajaría a Irlanda a operarme; es
ctor? -pregunté en
acas-. Hay un 50% de probabilidad que el nervio que está obstrui
la medicina irlandesa me hiciera recuperar las ganas de vivir y de poder darle a