Monserrat una joven que perdera a su prometido y se vera obligada a casarse con el hermano del amor de su vida, pero en el proceso de sanacion se sentira atraida hacia su nuevo esposo pero el apesar de estar enamorado de ella, siente que ella solo ve en el a su hermano muerto.
Señorita monserrat, por aquí! Decía un joven con un letrero levantado en la sala de espera del aeropuerto.
Adrian hola, ¿dónde está Zaid? Preguntó la joven emocionada cuando se acercó al joven.
Está esperando en el auto por usted ya que hay muchos reporteros esperando la llegada de una de las modelos más importantes de la industria y no quiere que se vea envuelta en ningún escándalo sin antes hablar con su familia, le explicó el asistente del joven.
Ya veo, gracias, entonces vamos porque muero por verlo.
El joven caminó adelante con el equipaje de monse para guiarla hasta el parqueadero subterráneo donde se encontraba Zaid esperando a su amada.
Cariño, finalmente estás aquí, dijo el joven mientras caminaba directo a ella para encontrarla.
Si amor finalmente he vuelto y ya no me volveré a separar de ti, respondió la joven abrazando al joven fuertemente.
Carino he decidido que el viernes haremos una cena para hablar con nuestras familias con respecto a nuestra relación.
Está bien cariño como tu decidas, sabes bien que te amo y que estos tres años en el extranjero han sido difíciles para mi porque te extrañaba a diario y nada mas te podía ver cinco veces en el año, pero ahora todo será diferente.
Si princesa así será, pero vamos te llevaré a un lado primero antes de llevarte a casa.
Esta bien, vamos.
Los jóvenes subieron al auto y salieron del parqueadero seguidos por el grupo de seguridad de Zaid, condujeron por treinta minutos hasta que finalmente llegaron a un restaurante italiano que el joven había reservado especialmente para ellos y su privacidad.
Carino pero porque luce vacío? Preguntó la joven al ver el establecimiento desolado.
Porque lo reserve todo para nosotros dos, así que sientete libre y cómoda porque solo estamos tu y yo, respondió él abrazándola por la cintura y guiandola a la mesa.
Wow!
Te gusta princesa?
Me encanta amor gracias
Sabes que siempre haré cualquier cosa para verte feliz.
Los dos jóvenes almorzaron felizmente entre conversaciones y muestras de cariño entre ellos, al terminar de comer Zaid llevó a la joven al jardín del restaurante que tenía un camino con pétalos de rosas que los conducía hacia un gacibo que se encontraba al final del jardín.
Este lugar es hermoso cariño, le dijo monse mientras se daba la vuelta para ver el hermoso jardín.
Monserrat rizzo aceptarías ser mi esposa? Le pregunto zaid incado en una pierna detrás de la joven sosteniendo una cajita de terciopelo que contenía un hermoso anillo.
La joven se dio la vuelta para mirarlo y ante esa escena se le cristalizaron sus ojos mientras respondía rápidamente.
Si, si quiero cariño, le respondió mientras le daba su mano para que le colocara el anillo.
Te prometo que te amare siempre y me esforzaré cada día por hacerte feliz a ti y a nuestros hijos hasta que estemos viejitos, gracias por aceptar ser mi esposa cariño le dijo el joven abrazándola fuertemente.
Gracias a ti cariño por amarme como yo te amo.
Después de la pedida de mano Zaid llevó de regreso a monse a su casa para que viera a sus padres y se instalará en su hogar por unos días hasta que se casaran y finalmente pudieran formar su familia.
Bueno amor descansa, te vendré a buscar mañana temprano para llevarte a un lugar que quiero que conozcas.
Esta bien amor entonces te espero mañana, le dijo la joven y le dio un casto beso a su prometido.
Hija? ¿Cuándo llegaste? Porque no me avisaste? Le preguntó Eliza en cuanto vio a su hija parada en la puerta.
Mamá! Llegué hoy pero quería darles una sorpresa por eso no les avisé, le dijo la joven mientras se acurrucaba en los brazos de su madre.
Ven vamos a ver a tu padre que está en el estudio, ustedes lleven el equipaje de mi hija a su habitación.
Las dos mujeres se dirigieron al estudio para sorprender a mateo el padre de monse, al llegar a la puerta eliza se apresuró a tocar la puerta y tras recibir la aprobación de su esposo abrió la puerta rápidamente.
Carino hay alguien que quiere verte.
¿Quién es? Preguntó el hombre de mediana edad mientras levantaba su cabeza para mirar hacia la puerta.
Hija? Que alegría verte cuando volviste?
Papa! Acabo de volver, pero que alegría verte, respondió la joven mientras corría hacia los brazos de su padre.
Mi nina, pero mírate ya eres toda una señorita desde la última vez que te vi hace seis meses luces más madura y más hermosa princesa, le dijo mateo mientras le devolvía el abrazo, sintiéndose culpable por lo que estaba a punto de hacer.
Los tres conversaron por un rato hasta que monse se sintio somnolienta y se fue a su habitación para descansar ya que se encontraba realmente cansada y tenía el efecto del jet- lag, así que en cuanto puso la cabeza sobre su almohada se quedo profundamente dormida.
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