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LA PACIENTE DEL CEO.

LA PACIENTE DEL CEO.

Maria Besa

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Capítulo

Alejandro, un chico bueno, que desea encontrar el amor en una persona especial. Cloe, una chica hermosa de clase media, que vive una relación de maltrato con Manuel, un hombre que no la valora. Ellos, por cosas de la vida se encuentran y ahí comienza esta historia.

Capítulo 1 Soy Luciana Moore

Soy Luciana Moore estudiante de la carrera de ingeniería civil en una universidad privada, por decirlo de alguna manera, soy la chica pobre de la clase, quien estudia con una beca universitaria, por lo que estoy obligada a mantener notas de estudio excelentes, sino, podría perder mi derecho a beca, compro ropa en tiendas de segunda mano y algunas veces no tengo dinero para poder comer en un restaurante de comida rápida, ah y lo más importante, estudio con un préstamo que debo de pagar en el momento en que me gradúe de la carrera, no comienzo a trabajar y ya estoy con una deuda bastante grande.

El grupo de compañeras con quien me relaciono, son chicas a las que sus padres les dan todo cuanto quieran y deseen, tienen mucho dinero y son quienes manejan la ciudad donde vivo y yo, estudio por los aportes económicos que las personas adineradas de mi ciudad hacen a la universidad, para que las personas económicamente mal puedan tener derecho a una educación universitaria como la que tengo, es una fundación sin fines de lucro que se llama RICLOALB.

Meli, hija del dueño de la franquicia de Vogue en el país, una chica regordeta, siempre con su maquillaje hermoso, su ropa de diseñador y sus zapatos caros que combinan perfectamente con el bolso de buena marca que combina siempre, Jessica, una chica a la que sus padres le contrataron desde el día en que nació una niñera, porque ellos se dedican a conocer el mundo, no tienen tiempo para estar con ella, siempre pendientes, a través de una video llamada por eso le dan todo lo que quiera, sin importar cuánto tengan que pagar, compran el amor y la presencia, con regalos muy caros, Karo, la mayor de todas, la que tiene su empleo, negocios, es independiente y vive bien, sus padres son dueños de la franquicia de Chanel, Christian Dior y muchas marcas más en el país; y después estoy yo, siempre luciendo la misma ropa, mismos zapatos, con mi maquillaje y cabello lo mejor que puedo, a veces rizado, otras veces liso, tratando de cambiar un poco, siempre arreglada, mis amigas me dicen que soy muy bonita, que tengo un cuerpo y una cara hermosos que si presto atención, puedo ver como mis compañeros de la universidad cuando entro al salón o estoy al frente exponiendo, se me quedan viendo, maquillaje barato, no de marca como mis amigas, que más de uno seguro quisiera invitarme a salir, pero que yo con ese novio que tengo, me cierro las puertas a conocer más personas, a mis amigas, no les cae bien Manuel, dicen que es una persona que me tiene como un trofeo y que me trata como hija en lugar de como novia, que me ridiculiza delante de las personas y que al yo ser una mujer hermosa, él lo que hace es exhibirme, siempre termino diciéndoles que él es una persona seria, que no es de bromas y que yo ya me acostumbré a su forma de ser, que al principio fue difícil, pero que ahora ya me siento bien.

Yo soy la que no tiene vehículo propio, debo de trasladarme en transporte público, autobús, taxi o con mi novio Manuel, que es un abogado y profesor de una universidad prestigiosa del país en la cual no gana mucho, pero bueno, al menos tiene una situación económica mejor a la mía en estos momentos, sus padres le pagan todo, José Romo y su esposa Nidia, son multimillonarios, son los padres de Manuel, he estado con él desde el comienzo de sus estudios hasta la fecha, apoyándolo siempre, en algunas ocasiones hasta con el poco dinero que me gano, dándole clases de baile a personas en una academia, esto del baile, para poder ayudarme con algunos gastos que mi beca de estudio no cubre, creo que él, Manuel es lo más cercano a eso que llaman el amor de mi vida (eso creía hasta que sucedió lo inevitable), con veinte años recién cumplidos, se me ocurrió la brillante idea de hacerme novia de un hombre mayor que yo casi nueve años, el cual no tiene absolutamente nada de malo, pero nada que ver con el perfil de hombre de mis sueños, son cuatro años que llevo con el chico y ya me ha engañado dos veces, siempre pienso que estuvo mal, pero al final termino perdonando, por costumbre, por su insistencia, no sé, tal vez por la insistencia de su padre o por el agradecimiento que siento con él, siempre me termina convenciendo de que me ama sobre todas las cosas, pero que la culpa es mía, él se queda en mi apartamento algunas noches durmiendo en la salita, porque aun soy virgen, soy de las que piensan que hasta que llegue el hombre indicado daré mi virginidad sin pensarlo y así de simple es mi vida hasta ahora, apartamento, universidad y de vez en cuando, la casa de los padres de Manuel, ya que él vive con ellos o los sábados de almuerzo con mis amigas en el mall cerca de mi apartamento, en casa de mis amigas, nos divertimos, a los padres de ellas creo que les caigo bien, siempre me cuidan, me protegen y me tratan de ayudar, solo que yo no les acepto dinero, no me parece correcto, ellos son muy buenos conmigo y es suficiente.

El padre de Manuel, Rubén, fue el abogado de mis padres desde siempre, era él quien les llevaba los negocios a mis papás, así fue hasta el día en que ellos fallecieron en aquel terrible accidente de tránsito, tenía tan solo diez años cuando quedé huérfana.

Mi vida de niña era muy diferente a lo que vivo ahora, estaba rodeada de lujos y dinero, siempre lo que pedía lo tenía, claro, mis padres siempre me enseñaron el valor de las cosas y me enseñaron que si hay alguien que no tiene y yo tengo, debo de desprenderme de parte de mis cosas para ayudar, creo que ha sido lo mejor que me enseñaron, ya que, siempre trato de ayudar a los demás, sin importar en que.

Vivía en una hermosa mansión en una de las zonas más costosas del país, mi padre tenía colección de autos de lujo y mi madre, coleccionaba piedras preciosas, recuerdo que tenía una gran colección de diamantes de colores que había traído de todos los países del mundo a los que habían viajado, siempre me decía "mi princesa hermosa, esta colección cuando crezcas, será tuya, para que hagas con ella lo que mejor te parezca".

Cuando ellos fallecen, los acreedores se hicieron presentes me sacaron de la que era mi casa, se llevaron los autos, las joyas de mi madre, solamente me sacaron de ahí con la ropa y zapatos, las joyas que mis padres me habían comprado, también se las llevaron, todo, absolutamente todo, gracias a don José mi suegro, que contactó un familiar lejano para que me cuidara, fue don José quien me echó en el bolso de mis cosas fotografías de mis padres y yo, sino fuera por él, no tendría nada de ellos, él siempre ha sido bueno conmigo y cuando Manuel me trata mal delante de ellos, siempre me defiende y lo hace disculparse, doña Nidia mi suegra es una mujer extremadamente sumisa, la he visto pocas veces porque no sale de su cuarto.

A don Rubén lo veo como mi padre, aunque no lo veo mucho, le tengo un cariño gigante, por todo lo que hizo por mí, él me cuenta que no fue fácil lidiar con los procesos de mis padres, ni encontrar a los familiares que me cuidaron hasta que cumplí los doce años y tuve que buscar para donde irme, porque los maltratos eras muchos.

Manuel y yo siempre nos quedamos en casa viendo películas, él dice que no tiene dinero y bueno, yo tampoco, gano apenas para poder ir saliendo con mis gastos, sin embargo, siempre trato de ayudarle en lo que puedo, son cosas mínimas, pero él siempre me llora necesidades, por decirlo de alguna manera. He venido ahorrando desde mediados de año para darle un regalo del día de los enamorados, una camisa hermosa de color verde que hacen que se resalte el color azul de sus hermosos ojos, y una corbata de un tono verde más oscuro, de verdad que me lucí con el regalo, trabajé mucho para poder comprarlo, sabía que le gustaría, él nunca me regala nada, pero igual, así somos las mujeres, detallistas hasta el alma.

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