/0/20722/coverorgin.jpg?v=082eb4733e86a643fa6e0c1a17ce777c&imageMogr2/format/webp)
Era la noche de mi primera exposición de arte en solitario, pero mi compañero Alfa, Camilo, no aparecía por ningún lado. El aire estaba cargado de champaña y halagos, pero cada cumplido se sentía como una bofetada, llamándome "la compañera del Alfa", no una artista.
Entonces lo vi en las noticias. Estaba protegiendo a otra mujer, una Alfa, de los flashes de las cámaras. Los susurros en la sala lo confirmaron: sus manadas se estaban fusionando, un pacto sellado con una nueva unión. No era solo que llegara tarde; era una ejecución pública de nuestro vínculo.
Su voz se coló en mi mente, fría y distante. "Katia me necesita. Eres una Omega, encárgate de esto". Ni una disculpa, solo una orden. En ese momento, el último hilo de esperanza al que me había aferrado durante cuatro años finalmente se rompió.
No solo me había olvidado; me había borrado sistemáticamente, incluso llevándose el crédito por la aplicación multimillonaria que nació de mis visiones secretas, desestimando mi arte como un simple "pasatiempo".
Pero la parte de mí que era callada y sumisa murió esa noche. Entré a una oficina trasera y le envié un mensaje a mi abogada.
Le pedí que redactara un documento para el Ritual de Rechazo, disfrazado como una transferencia de Propiedad Intelectual por mi "inútil" arte. Él nunca leería la letra pequeña. Con la misma arrogancia que usó para destrozar mi alma, estaba a punto de firmar la renuncia a la suya.
Capítulo 1
PUNTO DE VISTA DE ARIADNA:
El aire en la galería se sentía pesado. Olía a champaña cara, a perfume de humano y al aroma limpio y sutil de la pintura al óleo secándose en el lienzo. Pero el único aroma que mi alma anhelaba no estaba ahí.
Pino y la carga eléctrica de una tormenta que se acerca.
Camilo.
Mi Alfa. Mi compañero.
Se suponía que debía estar aquí. Esta era mi noche, mi primera exposición individual. La culminación de años encorvada sobre lienzos en el penthouse estéril y solitario que él llamaba nuestro hogar.
Un temblor de inquietud me recorrió. Alisé el sencillo vestido de seda que llevaba, de un profundo azul medianoche. Era elegante, pero se sentía como un disfraz. Toda esta vida se sentía como un disfraz.
Alguien chocó su copa cerca. "¡Un brindis por la compañera del Alfa! Qué Omega tan talentosa".
Las palabras pretendían ser un cumplido, pero cayeron como una bofetada. *La compañera del Alfa.* No Ariadna Montes, la artista. Solo una extensión de él. Un accesorio.
A través del Vínculo Mental, el espacio que compartíamos como manada, podía sentir los pensamientos de los otros lobos de Roca Negra en la sala. Algunos eran de lástima. *Pobrecita, la dejó plantada.* Otros estaban teñidos de una cruel satisfacción. *Siempre fue demasiado callada para un Alfa como él.*
El Vínculo Mental era un regalo de la Diosa Luna, destinado a unir a una manada, a crear una familia. Pero esta noche, se sentía como una jaula de susurros, cada uno un golpe directo a mi corazón.
Forcé una sonrisa para un coleccionista humano que admiraba mi pieza más grande, un vórtice arremolinado de plata y sombras que representaba el nacimiento de una idea. Su idea.
Mi mirada se desvió hacia la gran pantalla al final de la galería, que se suponía que mostraba mis bocetos digitales. En su lugar, estaba sintonizada con una transmisión de noticias en vivo.
Y ahí estaba él.
Camilo O'Neill. Mi Camilo.
Estaba de pie en las escalinatas del Palacio de Gobierno, sus anchos hombros una fortaleza dentro de un traje perfectamente entallado. Su cuerpo poderoso estaba inclinado de forma protectora, escudando a otra mujer del bombardeo de flashes de las cámaras.
Katia Chávez, la Alfa de la manada Luna Roja.
/0/19603/coverorgin.jpg?v=a26230e2efa8957e6b72fd7cc38487f4&imageMogr2/format/webp)
/0/8018/coverorgin.jpg?v=20250120175950&imageMogr2/format/webp)
/0/1358/coverorgin.jpg?v=20250523134842&imageMogr2/format/webp)
/0/21257/coverorgin.jpg?v=20251205150041&imageMogr2/format/webp)
/0/21261/coverorgin.jpg?v=20251205154539&imageMogr2/format/webp)
/0/21392/coverorgin.jpg?v=ddef2de5afb64eb0017ccf97242f95f1&imageMogr2/format/webp)
/0/19558/coverorgin.jpg?v=20251105035240&imageMogr2/format/webp)
/0/20458/coverorgin.jpg?v=bf321f31c02d67268841dcd0b3d43cca&imageMogr2/format/webp)
/0/1512/coverorgin.jpg?v=20250117114848&imageMogr2/format/webp)
/0/15821/coverorgin.jpg?v=dfd6153475989e4012e7583c63518599&imageMogr2/format/webp)
/0/9499/coverorgin.jpg?v=38337ed41ec42181a5f1e469cd73633c&imageMogr2/format/webp)
/0/2738/coverorgin.jpg?v=dec2307b68b1366bd2e5110b4ef486d7&imageMogr2/format/webp)
/0/17148/coverorgin.jpg?v=20250623104554&imageMogr2/format/webp)
/0/12324/coverorgin.jpg?v=20240829092253&imageMogr2/format/webp)
/0/19509/coverorgin.jpg?v=72fb638ed7b51ea4166c8e956def09ba&imageMogr2/format/webp)
/0/11046/coverorgin.jpg?v=20250115151556&imageMogr2/format/webp)
/0/17928/coverorgin.jpg?v=20251104211401&imageMogr2/format/webp)
/0/16717/coverorgin.jpg?v=77bea14aebc83b2e0ab71a5078fe25d2&imageMogr2/format/webp)
/0/17746/coverorgin.jpg?v=20251104192919&imageMogr2/format/webp)
/0/18052/coverorgin.jpg?v=20251104215448&imageMogr2/format/webp)