Un contrato con mi torpe y sexi secretaria
cosas que apenas unas horas antes había pu
e mi padre me sacará de ella, estoy perdida -se repetía una y otra vez m
oz ronca detrás de ella que l
esbelta, y ... Sonriente, y ahí, se dio cuenta de que de
clamó llevando las
ana jamás vendría a tu oficina, es un obstinado de primera cate
r so
l mismo día, y se gestaron en el mismo vientre fu
! Si er
preguntó Amber
ndo mientras giraba la ca
rea Laureti, que solo le hacía falta una mujer como Amber, sexi, alegre y sobre todo hermosa, era perfecta para él; en cambio, para el co
sculpa, se
e hecho, odio los protocolos -se sentó en e
idéntico a su jefe, pero, no la hacía temblar como él, y pudi
eres este empleo?
ro creo que el señor Andrea no me permitirá estar
eño de este cha
r con eso? -pregun
a, es más, muda tus cosas a la secretaria que está al lado de m
el empleo, y la oportunidad que le estaba brindando
erró en la oficina de su nuevo jefe. Era igual a la otra, pero esta tenía pa
ente la hizo temb
Laureti en que podemos ayu
, y luego vienes aquí -respondió Fernando detrás del teléfono con
documentos, y el enorm
». Pensó dudosa, para luego
r esto bien -dijo subiend
an archivado de forma online, porque Fernando dejaba todo para última hora cuando iba a
.
ficina, tomó un pequeño adorno de la mesa y lo e
sa loca, torpe, y... Ahss -quiso decir sexi de su secretaria, pero
fuerza, parecía que querían acaba
e trataba, tomó el
ón Fernanda, hab
e Andrea Laure
ó Andrea con
uetes para adultos, quiero conocer a esa chica. Ni se te ocurra
tró en ella relajado y con una sonrisa que a Andrea le molestaba grandemente
eír, joder!
eco-. Seguramente a Fernanda le pareció una ex
Fernando no iba a desperdiciar un momento para molestarlo, él e
sea mi secretaria, como la
serio. Odiaba la locura de su madre al ponerle ese nombre detrás de él: "Fern
o, y en estos moment
ria no la usa nadie, Fernando -sa
rió ampliame
sa vista hermanito, bien que s
protesta, sin súplica, y a la primera corriendo a trabajar con Fernando. Por suerte él era el que gerenciaba esa empresa y podía tomarla de nuevo, además, Ferna
de allá para acá mientras tenía unos audífonos puestos y organizaba los archivos de fo
a al ver unas bragas rosa pálida de encaje deba
palpitó fuerte, bombeando sangre a todas esas venas g
gar con la cabeza -¿Qué dices hombre? Es tu secretaria, además, tú no eres un puto promiscuo
ficina en estos momentos! -gritó fu
itió el cuerpo de la pequeña chica producto del miedo que le había
dos, Andrea camino hasta allá y a
r asustada cerrando
azules como intimidantes. Tragó saliva doblemente, quedándose inmóvil por
s labios a los de ella y besarla. Amber intentó resistirse, pero fue como que sus labios comenzaron a moverse solos, dejándolas embriagarse de
rano en mi oficina, y, procure no usar más esas faldas cortas qu
do insultarlo, pero el hombre sencillamente le había ro
mbres mi falda, eh». Pens
blo. Estaba acelerado, tenía los ojos de Amber en la
podía calmar sus pensamientos de lujuria, porque estuvo a pun
zona más costosa de Florida y vio la imponente figura de Andrea, sonrió con picardía, sabía lo que él venía a hacer ahí; se guindó de su cuello dejand
del edificio a altas horas de la noche. Estaba desconcertada por lo que había pasado con
su amiga, y entró para encontrarse co
d? -preguntó Luc
te y no lo soporto, ¿has de creer que me despi
te beso? Esto es un premio nob
contará como diez veces las cosas,
ves bien con él Amber -
preguntó con
Nueva York y pienso irme, así que segu
tar a ese obstinado hombre tanto tiempo ¿