La Apuesta.
e ha hecho la chica con la cual se unirían para cualquier travesura. Sin embargo, saben que esto era algo muy poco comparado con la
e del dolor con sus manos entre sus en
stro de dolor en su hermano, sabía cómo era Katherina y ni él querría ser enemigo de aquella mujer. Así que solo, es amigo de ella igua
ntre un gemido de dolor.- Mald
yudaba a levantarse.- Eso te pasa por provocarla.- Pudo levantarlo y el pelinegro posó sus manos
inó como podía a la primera clase. Al llegar al aula junto a sus hermanos se sentó como pudo por el do
lia, chica popular en la universidad y deseada por la mayoría. S
o.- Creo que necesito que me lo calmen.-
isoo y el buen amigo, Carlos.- ¿ Viste lo q
comodando sus lentes.- Fue genial
. El pelinegro lo obligó a voltear y Carlos se aferró más a su
tratando de quitarle las gafas.-
uatro ojos. ¿ Me ves o no me ves?- Decí
a dándole un empujón f
o que Belinda y al ella intenta
lentes mientras Carlos intentaba ver qué sucedía. El ojinegro le dijo a Katherina que no pasaba nada, pero para ella,pasaba mucho, estaba cansada de que Tom lo cogiera de colchoneta y juguete de bullying.- Que me
ió temor y rió.- No te las dar
ó cada lado de su cuerpo y rió levemente, mo
a con tu actitud de: Necesito que alguien me ayude a controlar mi diáfisis de atención.- Achicó la voz con gracia mientras todos escuchaban.- Yo te daré esa atención, ¿ sabes cómo? Así.- Fue hacia su puesto tomó su patineta junto a lo que parecía un libreto de guiones y al tiempo exacto ambas cosas las destruye con rapidez frente a él escuchando los exclamos del resto por lo que hi
una ma
irecto a su pupitre lo alzó y salió del salón y lo lanzó desde el séptimo piso, escuchándose como se rompió todo desde donde estaban.-¿Estaba tu celular ahí?- Le preguntó.- Vaya...Creo que te tocará comprar otro. Lo lamen