Nuestro Destino.
s no era opción, los cuartos en el eran demasiado para lo que la joven había podido ahorrar en esos tres años de arduo trabajo, más con lo que su padre podía colaborarle, y tres
madre. - dijo con toda seguridad y sin rastro de pe
a es tu madre, tienen el mismo color de ojos, cabello y fisco.
i rostro tampoco se le parece ¡¿y la altura?! - dijo como tratan
por tu padre, deja de imaginar imposibles, y
vez, marcarla como si fuera ganado, todo para que Jade volviera cada fin de semana a él, la necesitaba, pero no era solo por sentirse solo, Javier era un vividor de primera categoría, a esta altura Jade se ocupaba de mantener limpia su casa, lavar su ropa, cocinarle, todo, pero aún faltaba lo más importante, que lo mantuviera, si bien en un principio el joven no quería cruzar esa línea con su única amiga, ya que sabía que ella era demas
eocupada cuando se dio cuenta que
falsa tristeza, sabia como tirar los hilo
e Jade, la primera vez debía ser algo maravilloso y romántico, velas y chocolates, como en las películas románticas, ella era una soñadora, alguien que creía e
nto. - ese era el punto débil de Jade, cuando Javier le decía que la necesitaba, aun recordaba cómo había qu
blancos y grandes lucían dos botones rosados que a la vista eran una maravilla, su boca salivaba con la necesidad de prenderse de ellos, la pequeña cintura destacaba más gracias a su ancha cadera, y sus muslos estaban tan bien torneados que Javier deseaba apretarlos, sin pensarlo más y sin n
staba excitada, no había humedad alguna en su vagina y es que la vergüenza y la duda no le permitían a Jade sentir los besos desesperados que Javier repartía en ella para que dejara de estar tan rígida, mientras la rubia se
ió culpable de estar usándola, pero no tanto como para dejarla ir, ella era hermosa, dulce y l
al instante, Jade ahora estaba en una bruma de sentimientos hermosos, lo amaba desde los 15 años, siempre había soñado con ser su novia, ahora lo
, como para tratar de durar un poco más, o así sea tocar los l
ra demasiado tarde como para viajar a buscar departamento, por lo
ar su cuerpo había descubierto su nuevo mejor pasatiempo
, no olvides colgar las sábanas cuando la lavadora termine. - le recordó con las mejillas rojas y es que mientras Javie
- se despidió con un beso corto
no, nunca le pregunto si estaba bien, ni se mostró tierno, ni siquiera tuvo la consideración de dejarla bañarse primero, Javier se levantó apenas termino y fue a ducharse
Qué esperabas? ¿Que se comportara como un niño?, Javier es un hombre y tú ahora eres una muje
es discutiendo, más fuerte de lo normal, algo no estaba bien y
ue es tu mujer? ¡Di que es e
ómo puedes decir tal cosa?! - grito Isaías con verdadero enf
raban la mente de la joven quien estaba clavada en mitad de la sala, viendo d
epitas eso, yo la crie, yo la c
te deje? O mejor aún, que cuando sepa quién es su verdadero padre, descubra que tu sol
ablar así de tu hija, por D
o el día que te hice caso, la debí abortar apenas dejo de serme útil. - Jade al fin comp
s ojos derramaban lágrimas, llegando a la cocina que
el hombre al saber qu
aberración, pero no pudo, Magnolia era su debilidad, siempre lo fue, él por esa mujer hizo todo, su corazón dolió al tiempo que vio los verdes ojos de magnolia, el desprec
rador, al momento que vio como su pa
straba un poco de humanidad y empatía, después de todo, ese hombre la había consent
se escapaba entre sus manos como arena m
onto llegara. - la rubia sentía que su
las lágrimas comenzaron a caer del rostro del mayor, y no podía sentirse más frustrad
á. - imploro en u
... hija. - y esas, fuer
agnolia lloraba y la culpaba por la muerte de Isaías, debía alejarse de esa mujer, esa que,
pital, lejos de su hogar, escapando del dolor, por alguna extraña razón no fue con Javier, quería estar sola, en ningún momento se p
a enojado, sus ojos verdes brillaban aún bajo el manto de la noche, era más alto que ella y tendría unos cuarenta y tantos años
mayor y solo entonces Jade se dio cuenta que
- Jade quedo en silencio al ver a su alred
hora. - Jade había llegado al lado este del vecindario, sabía que no debía estar allí, nadie
nformo uno de los hombres y Jade entendió que si
muro la joven liberando su brazo del agarre de aque
Derek Bach más de la cuenta, tanto, que sus hombres
rosos del continente y quizás del mundo, s
ella, señor? - pregun
era yo una niña?
e un hijo y algunos como Derek tenían peor suerte, ya que él ni siquiera había podido tener un hijo, desde hacía 21 años que lo intentaba, al pasar el tiempo cada una de sus novias lo termino abandonando, hasta que conoció a Rosita Zabet, la joven que fue adoptada por la familia del magnate de joyas Amir Zabet, se había enamorado a primera vista de esa jovencita y a pesar de que ella no lo sabía y estaba con su primo Vincent, Derek haría todo para cuidar de ella, amán
italiana en tratar de secuestrar a Rosita, era su responsabilidad mostrarle que con un Bach nadie se metía y menos con la mujer que él amaba. Lo qu
iendo que nada es perfecto, el vacío que dejo Isaías
o por culpa de su madre y el psicópata de su mejor amigo, o si era por la crianza que tuvo, fuera lo que fuera, la joven pelirroja siempre tuvo en c
que sea hijo de Sug-Zhao, pero definitivamente él no tiene nada qu
nes, o tu prometido hará una huelga fuera de mi oficina. - Esperanza suspiro con pesar, queria mucho a Valentín, era el mejor
ueria hablar con u
pero si tienes algún problema con Valentín, debes solucionarlo, no puedo seguir si
n problema con e
or su apellido a la persona con
na última misión o en su defecto que haga la vista gorda de mi ausencia, porque definitivamente de todas formas lo hare
e que
lombia, debo atrap
udo evitar gritar, Esperanza
ero Bach, ella toco a mi amiga y pienso ent
, y no era para menos, los Bach casi no debían f
era verdad, aunque también era un pedido de Liam Bach, el padre de Lucero no
pero todo será
listo, envíen al equipo de contenció
e había enamorado realmente de ella, por un segundo se preguntó si se sentiría tan mal como en ese momento si terminaba con Valentín, pero quito ese pensamiento de su me
sa mujer cambiaria su vida, al igual