Millonario Arrogannte
de hadas, había esperado este momento y jamás creí que se sentiría así de bien. Pero como de costumbre, los pen
e esa salida?La incertidumbre me carcome viva, siquiera puedo pensar con claridad puest
itación, quizá no es lo que parece. Pero, ¿y si
ras intento no darle vueltas al asunt
espe
.
y sentirme parte de ella. Papá siempre se encargó de contarme de lo maravillosa que fue mi madre, cómo llegó a enamorarse perdidamente de ella y lo difícil que fue al dejarlo solo conmigo. Tenía cinco años cua
rrecta para mi, no creía en las almas gemelas ni mucho menos en las medias naranjas. De hecho, no espero que mi chico ideal sea perfecto,
parece un poco d
permiso a mi padre para salir, no sé que decirle sin que malinterprete la situación cuando vea a Luke. Bajo el último peldañ
to acercándome a él para lueg
echo, desaprueba que robe de su comida. Frunce el ceño al percata
de vas?
inutos antes
ago un puchero y él asiente dá
e conduzca con cuidado, eh -desvío la vista
ni un minuto y mi padre se da cuenta que no sal
amigo de la universidad que... -
antes que pueda dirigirme a ella,
to no puede e
es señor -sa
é deseas? -pregunta
ando zancadas hasta
usividad, demasiado para mi
e me presentó algo antes de
ntiendo -dig
detrás de mi. Ladeo la cabeza viendo a
esento a mi p
cho gusto
ieta con fuerza haciendo que Luke haga una mueca de dolor que simula
su discurso de padre protector, por lo que intervengo tomando por e
un rato! -me despido entr
arme cuenta, menos mal actué rápido, a ve
quién ibas? -inquiere L
antes de que llegaras -juego con mis m
h,
el auto en uno de los semáforos, recorro mi mirada desde su cabello rubio que cae en su frente, hasta bajar por la nariz res
uriosa? -habla de pronto
la ventanilla, pero es evidente que ha n
olpe al percatarme de lo que he dicho. Por otro lado él se ríe de lo torpe que soy al h
a, la estás e
un poco tonta cuando se trata
con lo que ha dicho. Pero cambia el tema y no me da
pregunta
furtiva para luego po
, adelant
nvitado a salir? -
or sopresa, puesto que la ex
extraño que l
s durante tres años y apenas es que me diriges
undo -dice apenado-. Pero sí sabía de tu existencia, de
o de alzar las c
siente esbozan