Se vende virginidad

jetivo. Si la situación fuera otra, quizá estuviera bien que me llam

o -"debo admitir que el trayecto de mi escuela a casa e

as todo lo que hago, lo hago por ti y p

malas personas y que te inculcaron todo lo que piensas pero

o hará saber

que es algo que se aprende con el tiempo? ¡De que lo voy a entender!; jamás nadie va a entender las razones por las que un ser humano

y no me quedará tiempo de hacer maletas ya que temprano voy a clases y de ahí me voy para casa de Zoe junto

lo necesario para la noche -hab

buenas familias por ende tenemos dinero pero bueno, "yo soy adoptada", no debería haber ning

todas vamos a comprar las cosas y si quieres algo lo pid

rezcan superficiales por dentro son un amor lleno de humildad. Siempre escuche decir que los verdaderos amigos son los que te ayudan cuando es

es lo que gasten o puedo llamarlo ahorita

somos tus amigas en las buenas y en las malas -Laris

romper el sentimentalismo y divertirnos, quien quita y este sea mi último día de vida, ya qu

grande, nos dividimos para terminar

nta del café y todas nos subimos

u auto, en el mío no cabemos todas m

sin auto, disque para evit

emáforo y pronto llegamos a casa de está, quien no tardó en bajar de la minivans y subir a su Cooper p

sos de nutella -l

ue hace cara de como si se nos ha olvida

sa casa; no será una boda, será una firma, no

rre que voy a bu

Nathan y Jader, como si a mí me importa el cómo me vean-; vamos a ir a comprarte un vestido sexi, muy sexi; que no

n esperando a lo qu

r de compras -

oe y muestra su carrito lleno

whisky -añade Johanna

cesitamos el vestido d

tengo dinero -vuelvo a decir

vestido -d

os tacones

rece Johanna-, solo hago una ll

sto no me parece buena idea; aunque creo que será un acto de valor, de mi parte

uego ir por mi atuendo, que ya es

y las pongo en mi carrito; voy

-me dice Larissa y yo levanto m

a, entonces todas vienen a pagar en mi caja y la gente de atrás se molestan al ver, lo mucho q

ra que las muchachas de servicio vayan orden

Larissa nos vayamos todas al centro comercial y allá te esperamos

mino, nosotras ya hemos recorrido un par de tiendas en uno de

Larissa, señalando con el

tramos en un café porque pedí a gritos un receso, ya estaba exhausta. Después de tomarnos un refresco continuamos con la búsqueda del vestido perfecto y los t

juntas no podemos salir, ya que somos muy escandalosas. Pobre de los vecinos esta noche, ya imagino a Larissa gritando; a Zoe riendo a grandes carcajadas; a Johanna llorar por su ex; a Virginia cantar Karaoke a todo pulm

anhelaba tener una hija mujer, pero mi madre nunca pudo dársela. Cuando probaron ir a un laboratorio le dijeron que Bárbara tenía una lesión en el útero por ende no podía tener más hijos, ahí fue cuando fueron por mí al orfanato, pero Bárbara no quería ser mamá, sin embargo acepto por amor a Marcos, el papá de Oliver; aun

os eligió Larissa. Estoy tan acostumbrada a que Bárbara elija por mí, que no tengo decisión propia, aunqu

to me independice de Nathan; para curar mis herida

as eligieron y no porque lo que ellas eligieron haya sido mejor, sé que no, sé qué se debe a mis problemas, mis traumas,

uto estas como en la luna -me habla

ya con mi atuendo

mentira a medias, ya que en realidad pienso lo dichosa qu

emos un abrazo grupal -propuso L

abrazo ya que andamos muy sudadas -Zoe es la más delicada de

eptó Larissa r

está montando su estudio improvisado; también están las muchachas de servicio acomodando y haciendo un

mos-, vamos, vamos a ponernos guapas; Larissa y América al cuarto de mis papás -manda y ambas obedecemos-; p

rbara es igual o más grande, sin embargo, a este se le mira un toque especial que

juntas -sug

nemos tal confianza que podemos bañarnos completamen

s tardamos mucho quien a

da a un restaurante chino, recuerdo que pedimos para llevar, ya que queríamos comer mientras mirábamos Netflix en su casa, en la salida del restaurante estaba una mujer en el piso, pidiendo un poco de comida. Zoe n

que está afuera del restaurante -Zoe se secaba las lágrimas

no sentía lástima por la mujer, si no, por su

orque si lo hacemos, terminaríamos como ellos. No podemos regalar nuestro trabajo a los demás, está bien que ayudes pero no trates de solucionar sus problemas porque lastimosamente, esa gente

Zoe es testaruda y le encanta ir a esos barrios. Ella dice que, para Jesús no hubo raza ni enfermedades contagiosas que le impidieron llegar hasta donde llegó. Ninguno de sus papás son de ninguna

cemos cada que nos bañamos juntas y es que no es la primera vez que lo ha

a vivir aquí -Zoe me ayuda a subir el cierre del vestido-, ell

ro me quedar

de malagüero-, él vive con Kelly y aunque ella y tú se llevan bien,

Johanna-; pero igual, tienes mi casa también a la orden

las mejores -nos di

tidos cortos y en tacones, y es que somos diferente a las demás. Nosotras nos v

y tomando, ella sola en casa y eso, es una de las mejores sensaciones q

arse uno mismo -me dijo ese día-, claro que nunca está de m

iales pero nosotras las personas no deberíamos de juzgar a nadie antes

grita Zoe, la más griton

e gusta; a mi parecer, le sale hermosa la voz; t

o que le lleva al DJ y se hacen ojitos. "Creo

r a América -grita Z

de cabeza y a pesar de que el cuarto de Zoe es climatizado, tengo bastante calor y es que estoy en medio de Larissa y de Zoe, esta

se me ha olvidado que

oe-, es de madr

, ya estamos tarde -las sa

reo -dic

mo -Larissa mira el reloj de me

se todo el mundo

ara nuestra mini fiesta y tan desaliñadas que nos despertam

ora soy yo la apresurada; miro mi móvil y t

ría con la policía; definitivamente es exagerada. Rápidamente le contestó diciéndole que ya iba en

que las demás se quedaran en casa de Zoe, me

rumbo a mi casa por mis maletas para llevarlas a casa de Nathan y lue