¡Otra vez! Matrimonio por contrato
n los ojos llenos de esperanza, t
está divorciada, pero no estamos en condiciones de ocultar eso
nublado porque no quería
é muy duro para conseguirlo, así qu
s? ¿Entiendes lo que
a boca -No quiero casarme todavía. Cuando seas
ró hacia un lado con un
las se pusieron
Claudia gritó con gran ira-¡¿porqué es
quieta, como si no estuvi
ías podido vivir en una familia tan buena? ¿Una universidad pres
lencio mientras Cla
pronto como murió tu madre! Ni siquiera pienso en devolv
s labios. Fue devastador y horrible que fuera
última vez. ¡Sé que una bofetada en la mejilla
miró a Avery con la mirada más
uego se dirigió a la cocina para poner
lmente, como si hubiera experimentado esta
-Entonces deberías haber dicho que te vas a casar con buena
dureció ante la voz rencoro
mejillas hinchadas era la pr
n la cara, ¿no deberías estar agradecida e ir? Solo es una boda ¿Además vienen de una familia con mucho d
abras con un oído y l
ntenté responder, la que s
dió-¿Pero sabes que? El hombre con el que tend
r un momento. Con lo que dijo Abigail con una sonr
visito, de que las mujeres que conoce cambian día a día y
su anterior esposa fue porque llevaba mujeres a
estaba de pie con los labios bien cerrado
ara es bas
algo así- Añadió, riendo hacia la sombría Avery -Te envidio. No tendrás
en flor tiñeron el mundo de color. Avery se dirigió a la
a pura y una falda bordada q
ecibía ropa de lujo tan
s y caía hasta los hombros. Los aretes en forma de flor brill
al del café, Avery recordó la llamada
n su madrastra, se sorprendió al intentar encontrar i
, cancela la reu
reunirás es absolutame
as horas de la noche, con
personalidad es tan mala que todos sus subordinados le odian muchísimo.
ta lo escaso que sea el dinero, ¿cómo se le ocurre casarte con un tipo
la persona a la que se enfren
ntió muy avergonzada ni molesta mientras escuchaba su historia. Esto era algo que ya
ra su contrincante,
entrada del café. Avery entró al café y encontró a un hombre sentado junto a la ventana. E
ente, Avery caminó hacia donde estaba.
el Sr. Gil
ando su tableta levantó
se sorprendió y ab
scuros y una nariz afilad
ctivos y una mandíbula de ángulo pronunciad
os faciales perfectos, como una escultura. Había oído que tení
mi vida hubiera visto a