Lazos de amor
iv
tiempo pasaba cuando estaba junto a Christine y que llegaría tarde a mi vuelo si no me daba prisa. No había c
istine había sido más que increíble. No se trataba sólo de la forma en que podía leer su cuerpo o del placer que sentí
veces se sentía bien e incluso el mal sexo podía terminar en un orgasmo al final. Christin
rtátil. Mi padre me había enviado a esta conferencia en su nombre y era hora de volver a casa, a Diablo Lake Ov
mo lo estaban ahora en mi mente y que pronto estaríamos haciendo más recuerdos. Sentía la carter
los edificios de la ciudad, miré por la ventana y pensé en ella. Ojalá hubiera podido cargar mi te
en despejarse y llegué al aeropuerto casi tarde para mi vuelo. Pagué al taxista a toda p
a del portátil del asiento de al lado. El conductor abrió el maletero y
ía iba a llegar al vuelo. Mientras me dirigía a la puerta de embarque, volví a comprobar que lo llevaba todo enc
faltaba la cartera. Miré a mi alrededor, preguntándome si se me
caer en
a cartera podría haberse caído fácilmente. Mi documento de identidad y mis tarjetas eran lo de menos ya que
hablé de mi cartera perdida. La amable mujer del mostrador puso un aviso por el
el número de la compañía de taxis. Me puse en contacto con una operadora central que me dijo que había avis
razón sobre el destino, iba a necesitar que se pusiera en marcha ahora. Oí que me llamaban para embarcar y me dirigí al mostra
ado mi cartera. Pero ésa era la única buena noticia. Mis tarjetas y mi documento de identidad seguían allí, pero el dinero en efectivo hab
i frustración. Lo que había ocurrido con mi cartera era un golpe de mala suerte, pero no conseguir el apellido de Christine era mi propia
se hundió d
....................
Antes de la
un momento, miré alrededor del lujoso dormitorio que definitivamente no era la dim
e se me dibujó en los labios. Mi cabeza divago y los recuerdos se hicie
míos y sus manos recorriendo mi cuerpo. Acababa de conocerlo ese día, pe
mientras tanteaba para meter l
s enterraba mis dedos en su cabello lacio y rubio, manteni
cuello, sus labios rozaron mi piel y me hic
hiciera realidad. Sólo conocía a este hombre desde hacía unas p
. Oliver me atrapó, sus fuertes brazos me rodearon la cintura y me mantuvieron erguida. P