El encuentro con el amor de la vida

on que su esposo aún no había llegado.

io cuenta de que él

w resp

unirme con

no estaba de humor para hab

dio la vuelta y se ma

a. Ya eran las siete y cuarenta. Maveri

el mensaje que le había enviado. No había n

ué problema tenía este hombre? ¿No tenía interés en conocer a la mu

a de preguntas, un sentimie

o. Después de tragar un bocado con fuerza, dejó e

. Si esta noche no te viene bien, d

umor de Stella se apagaba. Así que odiaba aún más a Mave

rte esquinazo dos veces el mismo día? Te merec

fuego". Juliette intervino y

decepción y cerró la boca, aun

ette se volvió hacia

tella. Tal vez le haya

creía que el amor verdadero podía sucederles a Stella y su es

silencio. Volvió a

abía respondido a

isto o la esta

-

u esposa y al novio de esta se había visto f

cenar. Por alguna razón, no quería que s

a explotar en cualquier momento. Acababa de entra

esposa acababa de e

runcieron en c

otro hombre en público y se atrevía a enviarle u

tan pret

mujeres. Muchas habían hecho cosas escandalosas, pero ninguna se acercab

éfono a un lado, arrancó el aut

go paseo por la ciudad. Ya era

mansión fue a su abuela, Lucia Clark. Estab

ira qué hora es! ¿Por

l hombro, su nieto miró el reloj que

aquí? ¿No deberías e

anzó una mirada intensa. "El abuelo de Stella me ha dicho que no la recogiste en el aeropuerto. ¿Dónde demoni

encia brilló en lo

padamente su abrigo en el s

contó todo lo que había v

ró y añadió en

sexuales provocaron mi nacimiento. Aunque todos me vean com

lo llamó en un tono suav

pasado. Como siempre,

las rodillas mie

ienso ser fiel a mi esposa y espero que ella haga lo

silencio cuando t

nsarlo un rat

es de conseguir que te casaras con Stella. No es una mujer promiscua. En

ió los labios

irió ella. "Como nunca han salido juntos, primero deberían dedicar más

é decir a eso, así

iré al chófer que te lleve a casa.

us ojos hundidos y las líneas de cansanc

la a casa, Matthew se tumbó

te seguía apareciendo en su mente. No podía quitársela de la cabeza po

uera a funcionar. Quizá había ll