Entre mafias
rc
anos que se dedican a abrir prostíbulos. No tengo problema con ello, todo lo que sea implem
que se dedican a secuestrar o a obligar a las mujeres a que trabajen para ellos. No sería la primer vez que intentan
que es una mierda. Luces a media intensidad, paredes pintadas en tonos negros y dorados, las cama
mayor sentándose enfrente de Dante
ios. Solo oir s
ano ¿dónde es
explica - Cómo dije en el correo todo
si mienten o no, pero cuando alguien me di
de Fento. No se porque cojones no ha vuelto tod
ancantilado, cuando notas la presión en el estómago, ese vuelco, lo siento cuando
r la fuerza. Sin duda es ella y este tío está muerto
llego a él escucho parte de la convers
solo sirvo copas, soy camarera - Dice con un leve tembl
s lo que
e daño, quiero matarlo lenta y dolorosamente, así que lo separo de la
i cara. Después de tantos días vuelvo a ver sus enormes ojos verdes. Se le corta la respiración y antes
morí con ella, pero ahora todo ha cambiado, tengo
i lado viendo l
cortale
el mismo camino que
cipal y yo. Corro como si se me fuese la vida en ello. Después de sentir su pérdida de forma brutal como ja
a separarse de mi. Cuando Dante estira la mano para sujetarla, ella agarra su brazo, hace un quiebro
n tío que mide más de un metro ochenta. Corro
levanto. Sabiendo que ha aprendido a defenderse no
patadas en todas direccio
a nuestro paso. Sin pensarlo demasiado abrimo
cuando hago hora y media de deporte, pero por primera vez
erona - Inform
cos amigos. Ni los mejores hombres han logrado nunca tumbarlo, llega Mía y en u
ndo, pero no, ha estado silenciosa. Cuando veo por el retrovisor como se abre el maletero y su cuerpo cae en medio de la carretera l
r - Amenazo a
l que el coche que v
del suelo y la estrella con fuerza sobre la fría cal
el costado y sale vol
lo que haga o diga - giro sobre mis pies para que los demás me vean y
ando por ponerse de pie, pero se ve clarame
oloco mis manos so
ar mis ojos. No los aparta. No me
o los dedos por encima del cabello -
hacer eso y
haría, pero eso no hace
e me l
ren comprendiendo a lo qu
as manos, sin fuerza y c
olver. Si vuelvo est
ones que me da. De pronto su cuerpo se desploma, pero ante
ha reflejado en sus ojos solo puede ser por su padre o por mi. Si yo le hubiera querido hacer daño, lo habría hecho en el bar donde la
de última hora que un médico volará con nosotros para c
formo - llama a Fento y dile qu
bien,
acio, escuchando la rítmica respiración d
un gilipollas, así que saco las esposas y cierro un extremo a
explicaciones. Es la primera persona que logra engañarme y escapar de mi radar. Si el tema se d